FAMA, AMOR Y BELLEZA
de Ramiro Arribas (Rubén Cortada,Cortada al que los argentinos que vieron “El Príncipe” lo recordarán como Faruk). Juntos llegan a Marruecos, donde Sira queda enredada en una estafa, en una deuda, y en un conflicto con matices políticos, que la obligan a demostrar su fortaleza.
Mientras “El Tiempo Entre Costuras” pone el foco en el amor y en el desencanto de la costurera en Tánger, hay un relato paralelo con el horror en Madrid, con el sufrimiento de su madre y de sus compatriotas. Algo la llevará a Sira a cambiar su identidad y empezar a vivir otra realidad, alejada de sus afectos. Con argucias inconfesables y ayudada por amistades de reputación dudosa, logra poner en marcha un selecto atelier en La miniserie se grabó en más de 100 locaciones, y costó medio millón de euros por capítulo. Ugarte protagonizó “Julieta”, filme de Almodóvar el que atiende a clientas de orígenes remotos y presentes insospechados.
Nacida en Madrid, Adriana en nieta de Eduardo Ugarte, escritor y escenógrafo y colaborador de Luis Buñuel.
Si bien su reconocimiento mundial llegó con “El Tiempo...”, en España alcanzó la popularidad cuando protagonizó, entre 2008 y 2010, la telenovela “La Señora” para TVE. “Soy apasionada del origen de todas las cosas. Adriana significa nacida de las aguas y Ugarte, isla. Dicen que el hombre proviene en última instancia del pez.pez Me gusta estar vinculada a este maestro salado: él me proporciona el coraje para saltar cada día al vacío desde mi montaña de arena bajo la piel de millones de seres distintos para respirar a través de sus pulmones, quizá de sus branquias”, dice como una manera de definirse a sí misma.
Celosa de su intimidad, la actriz decide no dar detalles de su relación sentimental con Gonzalo, a quien conoció durante el rodaje del filme “Palmeras en la Nieve”, y con quien lleva casi dos años de relación.
Realmente hermosa, Ugarte es contraria al uso del photoshop para eliminar las imperfecciones humanas. Para mantener su belleza, asegura que sigue tres principios básicos: “respetar las ocho horas de sueño, beber líquidos, sobre todo agua, y tener la conciencia tranquila”.
“Duermo ocho horas, bebo agua y tengo la conciencia tranquila”