El COUTURIER
Conocido como el escultor del cuerpo femenino, Azzedine ALAÏA es uno de los diseñadores de moda más respetados y fascinantes del planeta. En el Design Museum de LONDRES, una exposición dedicada a su trabajo se presentará del diez de mayo al siete de octubre
Azzedine Alaïa es un creador que no se parece a ningún otro. Nacido en Túnez en 1940 de padres agricultores de origen español, estudió clases de escultura en la Escuela de Bellas Artes en su país antes de mudarse a París a finales de los 50. Fue en la capital francesa donde su vida y carrera profesional tomaron un nuevo giro. El modista abrió un pequeño atelier en la década de los 70 y lanzó su primera colección a principios de los años 80, época en la cual adquirió fama. Perfeccionista, Azzedine Alaïa nunca quiso adaptarse a los calendarios y las temporadas dictadas por el mundo de la moda. Al contrario, seguía su propio ritmo, presentando sus nuevas creaciones únicamente cuando él las consideraba listas. “Mi obsesión es hacer que las mujeres sean hermosas”, decía. Dando una gran importancia a cada detalle, Azzedine Alaïa se enfocó en expresar la belleza de las formas femeninas y crear una narrativa a través de sus diseños.
Del próximo 10 de mayo al 7 de octubre, el Design Museum de Londres albergará más de 60 prendas icónicas en el marco de la exposición Azzedine Alaïa: The Couturier, concebida y co-curada por Mark Wilson —curador en jefe del Groninger Museum— y por el diseñador de moda que trabajó en este proyecto antes de su fallecimiento en París en noviembre pasado (2017) a consecuencia de una caída. Creadas a principios de la década de los 80 hasta estos últimos años, las piezas expuestas reúnen varias creaciones famosas como el vestido con cremallera, el vestido de vendajes y el corsé de cuero perforado, entre muchas otras. Inspirándose en la moda pero también el arte, la
fotografía y el diseño, Alaïa trabajó toda su vida para sublimar el cuerpo de la mujer. En esta muestra, se entrelazan sutilmente historias de su vida personal y de su carrera profesional. Entre las clientes renombradas del couturier, cabe mencionar a Greta Garbo, Grace Jones, Michelle Obama, Rihanna y Victoria Beckham, pero su musa fue Naomi Campbell a quien Azzedine Alaïa descubrió cuando la modelo tenía 16 años de edad.
“Todos sabemos que Azzedine logró transformar el cuerpo de la mujer en algo muy especial (..). Capturó la esencia de la feminidad”, dijo Naomi Campbell en los Fashion Awards del British Fashion Council en diciembre pasado. En las salas del museo de Londres, junto a las prendas del modista, se descubren también una serie de elementos arquitectónicos especialmente comisionados a artistas y diseñadores con quienes Alaïa intercambió creativamente a lo largo de su vida. Ronan y Erwan Bouroullec, Konstantin Grcic, Marc Newson, Kris Ruhs y Tatiana Prouvé son algunos de los nombres que destacan. Maestro de la costura (corte, talla y confección), el modista usaba el drapeado, esculpía directamente sobre la figura humana y cortaba todos sus patrones. Atemporales, las creaciones de Alaïa reflejan su visión de la moda como un arte, la importancia que daba a la estructura cuando diseñaba y su búsqueda constante por la perfección, trabajando horas, días y meses sobre una prenda. “La moda va a existir siempre. Existirá a su manera, en cada época”, comentaba Azzedine Alaïa.