Carta de la Directora
La MODA no detiene su desarrollo; sin embargo, ante las CRISIS ecológicas y sociales los creadores se ven afectados y envían un mensaje para mover la consciencia de la INDUSTRIA y de quienes la consumen
La manera de consumir la moda ha cambiado drásticamente y sigue cambiando cada día. Hace unas semanas estaba en Medellín para asistir a Colombiamoda por primera vez y fue refrescante ver la pujante industria de la moda colombiana. Visité tres marcas locales que producen en sus propias fábricas, además de proveer textiles para otros consumidores. Organizaciones como Inexmoda han descubierto el potencial de esta industria y han invertido en ella fuertemente. En
Vogue Latinoamérica, nos enorgullece el espacio que Vogue Talents Corner ofrece para dar visibilidad a las colecciones. En esta edición me entusiasmaron varios jóvenes creativos como Alexandra Bueno, y el dúo detrás de Alado Design, Alejandro Gonzalez y Andres Restrepo. En un recuento de lo mejor en diseño colombiano —capturado por el lente del talentoso fotógrafo Tigre Escobar— presentamos algunos favoritos que esperamos se conviertan en los de ustedes.
En esta edición, en una producción de Ivan Ward Raffik y Marina Gallo, abordamos las mejores colecciones. La actriz Úrsula Corberó, de La Casa de Papel, aparece en los estilos más chic de los 80 y en una íntima entrevista, entramos al mundo detrás de la intérprete de la exitosa serie. Algunas de las ideas más fuertes en las colecciones de este año regresaron a los años 80 e hicieron un guiño a los 60, como se vio en los desfiles de Gucci y Valentino, y en las propuestas Haute Couture. Pero sería ingenuo no señalar cómo el trabajo de tantos diseñadores se ha visto impactado por el caos que vive el mundo. Es difícil imaginar que un creador no sufra lo que se le hace al medio ambiente. Recuerdo el show de Calvin Klein, donde la atmósfera era apocalíptica y las modelos salieron con básicos de estética estadounidense y máscaras protectoras. Demna Gvasalia, en Balenciaga, les puso parkas de capas múltiples como para resistir ráfagas o climas extremos. Balenciaga hizo saber que se asociaba con el Programa Mundial de Alimentos, donando el 10% del precio de venta de algunas piezas en sus tiendas. Incluso, marcas asociadas con las pieles han detenido esas prácticas del todo. Hay también una reacción de los diseñadores al caos social. En nuestra región, Venezuela atraviesa una crisis política, en Nicaragua, seres humanos han sido masacrados por protestar, y en México, personas que se postulaban a cargos públicos fueron asesinadas. Es imposible ignorar todo esto. Recientemente, alguien me dijo que no se sentía con el ánimo de comprar nada. Lo entiendo completamente. Es en tiempos de crisis cuando nos detenemos a reflexionar sobre esos temas que nos hacen sentir la necesidad imperiosa de generar un cambio.