VOGUE Latinoamerica

Violet Chachki,

Ella se desvela como una artista completa. Violet no es solo una drag queen que ganó un reality, sino una mente creativa que, en Jean Paul Gaultier de PIES a cabeza, demuestra que tener un solo truco bajo la manga no es lo suyo

- Fotógrafo MANUEL ZÚÑIGA Estilista NAYELI DE ALBA

No es solo una drag queen, sino una mente creativa que, en Jean Paul Gaultier de pies a cabeza, demuestra que tener un solo truco bajo la manga no es lo suyo.

Tal vez sean muy pocas las personas que no recuerden el momento exacto en el que posaron sus ojos sobre Violet Chachki. Aquel que la reconoce muy probableme­nte quedó prendado desde el inicio: cuando en la séptima temporada de RuPaul’s Drag Race impactó con un vestido de lentejuela­s negras que, al girar, se convertía en un jumpsuit con estampado de tartán; tal vez fue en un escenario años más tarde, donde, después de despojarse de varias prendas, subió a un enorme aro para hacer acrobacia aérea y dejar caer algunos cristales de su atuendo. O podría ser cuando se convirtió en imagen del legendario Jean Paul Gaultier. Sea cual sea el momento, Violet perduró (y sigue) en la mente de quienes encuentran en ella un escape a la norma, así como ella también lo reconoce en sí misma.

Ignorar la belleza de Violet es imposible, una cualidad que, a su manera de ver, representa empoderami­ento más allá de algo efímero. “Para mí esto es como un escape, un empoderami­ento. Me da fuerza y confianza, y es lo que intento regresar a las personas que van a mis shows o les gustan mis imágenes”, cuenta la artista que comenzó haciendo drag en Atlanta como un mensaje de rebelión, de ir en contra de las normas de género que aún dicta la sociedad. “En verdad lo disfrutaba mucho y me hice adicta a esa libertad que me daba el drag”, confiesa. Violet es inconfundi­ble gracias a esa estética que ya es su sello personal desde hace tiempo: corsés que llevan su cintura a dimensione­s minúsculas, cabello negro lustroso y ondulado a la perfección, tacones que parecen desafiar las leyes de la física y una vibra retro que emana sensualida­d y evoca a mujeres dominantes como Vampira y Dita Von Teese. Su sentido de la moda la ha llevado no solo a presenciar decenas de shows de la semana de la moda desde Nueva York hasta París, también a desfilar en ellos, ser una de las primeras drag queens invitadas a la MET Gala en la historia y colaborar con Jean Paul Gaultier, que ha sido, como ella pone en palabras, “un sueño hecho realidad”.

El momento privilegia­do del drag que se vive actualment­e, ha ayudado a la integració­n de un arte relegado a la noche a aparecer en escenarios cada vez más comunes y, como ella asegura, a que las personas que realizan esta expresión artística sean tomadas en cuenta. “Es muy emocionant­e ver que las personas que no se conforman con las normas de género, o las personas trans, son cada vez más aceptadas y se les dan nuevas plataforma­s. Escucho historias de personas jóvenes que nos ven como modelos a seguir, algo que yo no tuve cuando era joven”, asegura quien quiere ser recordada como “alguien que trabajó mucho en sus pasiones, y que hizo un impacto visual y

social”. Y es por eso que el drag no es lo único que ronda en su cabeza estos días, pues aunque recienteme­nte estrenó su show en solitario A Lot More Me en Europa y también lanzó su primera fragancia Dirty Violet, Violet espera en un futuro crear coleccione­s cápsula con alguna rma de moda. “Cada año me veo más cerca de la vida que quiero para mí misma. Creo que el 2020 será un año decisivo para mí, porque puede ir en una dirección o en otra. El mundo de la moda es en verdad lo que me apasiona en estos momentos, y eso sucede gracias a las colaboraci­ones con marcas como Jean Paul Gaultier, más que el show drag”, se sincera.

Hoy, al dejar sobre la mesa tantos proyectos profesiona­les, Violet se enfoca en el interior y su parte como Jason, quien le da vida al personaje que, en algún momento, le hizo cuestionar su identidad de género, con la que ahora se identica como de género ˆuido. “Mucho tiempo de mi vida me enfoqué en el aspecto drag, y no voy a decir que me perdí a mí mismo en ello, pero denitivament­e no ponía atención en la realidad y lo que estaba pasando conmigo. Desde hace uno o dos años, he puesto más atención en mi parte masculina y en asegurarme de que estoy bien, sin embargo, Violet me ha ayudado a responder muchas cosas sobre sexualidad y género”, finaliza.

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 ??  ?? Look de Jean Paul Gaultier Alta Costura; zapatos de Prada. En página opuesta: falda y torera, de Jean Paul Gaultier Alta Costura; vestido en mesh, de Fernando Alberto; pendientes, gargantill­a y anillos, todo de Bulgari.
Look de Jean Paul Gaultier Alta Costura; zapatos de Prada. En página opuesta: falda y torera, de Jean Paul Gaultier Alta Costura; vestido en mesh, de Fernando Alberto; pendientes, gargantill­a y anillos, todo de Bulgari.
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