La historia de las obras aparecidas de Berni.
De un lote descubierto pocos años atrás, llegó una selección a la feria Mercado de Arte Contemporáneo-Arte Avanza, a través de la galería Cosmocosa, de Buenos Aires. En el Cabildo se exhiben algunos hallazgos nunca vistos por el público. Estas obras del m
La última revelación de obra de Antonio Berni que no se conocía es uno de los imperdibles de Mercado de Arte Contemporáneo-Arte Avanza: la posibilidad de ver en Córdoba una importante selección de más de 40 obras de las casi 400 de un lote de piezas inéditas del maestro rosarino, una “propuesta de museo”, a decir de Amparo Díscoli, directora de la galería porteña Cosmocosa que las trajo a la feria.
El hallazgo de 380 obras inéditas de Berni en 2014 llevó dos años y medio de trabajo. Cosmocosa adquirió el conjunto completo, restauró las obras y encomendó su estudio al prestigioso historiador Marcelo Pacheco que realizó una rigurosa investigación. El resultado fue una gran muestra en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, titulada “Antonio Berni, Revelaciones sobre Papel, 1922-1981”.
Se trabajó en conjunto con la familia Berni (sus herederos) a través de la Fundación Antonio Berni y el Archivo Berni en Madrid, y con las autoridades el Museo de Arte Moderno para exhibir un conjunto de obras que refuerza varias hipótesis de su historiografía, señala Díscoli.
60 años de producción
La muestra en Buenos Aires se inauguró en octubre de 2016, y se extendió hasta fines de mayo de este año. El catálogo está a disposición del público de la feria. Además, en uno de los principales ingresos en la carpa donde se ubica el stand de Cosmocosa, se verán incluso obras no exhibidas en Buenos Aires, que complementan el recorrido de los casi 60 años de producción del artista.
Las obras se organizaron en núcleos temáticos: paisajes, retratos, ilustraciones para obras musicales y literarias; obras eróticas, sociales, políticas del contexto nacional e internacional. Son todas obras sobre papel, con diferentes técnicas. “Algunas sorprenden con la síntesis y belleza del uso del marcador o la birome, otras el grafito, así como collages y temperas que se asemejan a sus grandes óleos ya conocidos”, señala Amaparo. Y agrega: “Sorprende la vigencia de obras realizadas entre 1927 y 1981”.
La historia del hallazgo
Antonio Berni es “un animal pictórico de gran parte del siglo 20”, un artista de cabecera, destaca Amparo Díscoli.
La directora del espacio Cosmocosa le cuenta a VOS la historia del hallazgo, que se remonta a 2013, cuando asistió a una importante muestra del artista en un museo de Houston (Estados Unidos).
En una cena posterior a la inauguración, Amparo manifestó su percepción sobre esa muestra con gente del mundo del arte: “En la reunión, una chica se acercó y me dijo que su madre quería hablarme. Una familia muy allegada a Berni se estaba mudando y tenía un depósito muy grande con obras de arte; recordaban que su abuela les había dicho que había unas carpetas con dibujos de Berni”.
Pero habían descubierto que era mucho más de lo que les ha- bían contado. “Con necesidad de fondos para esa mudanza, la familia decidió venderlas y para eso me convocan”, continúa Amparo.
Cuando empezó a ver las imágenes, Díscoli casi se desmaya, tanto por la potencia de las obras como su belleza: “Sentía que eran diarios íntimos del artista, que en algunos casos lo reconocía, y en otros no, porque jamás había visto cosas así”.
Entendió que se trataba de un lote muy valioso que aportaba a la historiografía del artista. “En vez de vender individualmente piezas, decidí intentar conservarlas y estudiarlas, saber de la autenticidad de todo el material. Con la ayuda financiera de unos coleccionistas adquirimos el lote completo de esta familia y nos quedamos con las obras. A partir de ahí comenzó la aventura”.
Se empezó por inventariar las obras y fotografiarlas. Y vino el paso siguiente: “Una vez que tuve todos los detalles técnicos, concurrí a Marcelo Pacheco, uno de los historiadores del arte más importantes de la Argentina que ya había trabajado con muestras de Berni. Cuando él vio el material, se sorprendió”.
Cosmocosa le propuso a Pacheco indagar sobre las obras para ver de qué se trataba: ocho meses le llevó la enorme tarea de presentar un informe de cada una de las 389 piezas. “Pacheco hizo descubrimientos asombrosos, había imágenes muy impactantes, paisajes exquisitos”, revela Amparo.
En situaciones así, es decisivo el momento de la venta. Relata Amparo: “Si bien quienes me habían ayudado en adquirir el lote tenían interés en la obra de Berni, no podían conservar todo, el destino final era la venta”. Por el valor histórico, Pacheco le aconsejó que antes las obras merecían una muestra, y así surgió lo del Mamba, donde se exhibió durante más de seis meses.
Mientras Pacheco estudiaba las obras, la restauradora Cecilia Oviedo Bustos se dedicó a limpiar cada una “con amor y paciencia, ya que el papel es un material endeble”, dice Díscoli.
“Después de un año y medio de haber tomado contacto con las obras, la noticia corrió como reguero de pólvora, y el público tuvo la posibilidad de ver estos trabajos, una selección de 222 representativos de todos los núcleos, con dolor de excluir algunas obras muy exquisitas que presento ahora en Córdoba”.
La muestra del Mamba finalizó en mayo, algunas ya encontraron casa, otras fueron adquiridas por museos públicos de todo el país. “Esperamos que nuestra selección de 40 obras en Córdoba sea de interés”, se entusiasma.
No sólo compra y venta
“Es bueno que se sepa que el trabajo de un galerista no siempre es comprar o vender, también es hacer un aporte a la escena artística, porque revelar esta producción desconocida de Berni no sólo es de interés para coleccionistas sofisticados”, reflexiona Amparo. Y aclara que, al tratarse de obra sobre papel, “los precios están lejos de ser los valores inalcanzables de su pintura”. Y sí, “una oportunidad para que gente joven comprometida con el arte tenga una de estas piezas como base de su colección”.