Cine. Cómo es la película de “Pampita”.
Hay que decirlo (o escribirlo, en este caso): la curiosidad por ver a Carolina Ardohain en pantalla grande, debutando como actriz, justo en uno de sus momentos de mayor exposición, juega un poco a favor a la hora de ir a ver Desearás al hombre de tu hermana.
La nueva película de Diego Kaplan (Igualita a mí y 2+2 )es un melodrama erótico basado en la novela de Erika Halvorsen. Cuerpos desnudos y esculturales, caras bonitas, escenas de sexo que son como coreografías y un preciosismo notable a la hora de filmar hacen de la película algo vistoso.
La historia está ambientada en los años ‘70 y todos los elementos de aquella época no sólo están presentes sino que son exacerbados. La música hace que la cinta parezca de a ratos un videoclip, uno agradable de ver, pero las actuaciones y el guion no están entre los fuertes del filme.
Ofelia (Pampita) y Lucía (Mónica Antonópulos), son dos herma- nas que luego de no verse por varios años se reencuentran en el casamiento de la segunda. El elenco lo completan la madre (Andrea Frigerio), y los novios de las protagonistas, interpretados por Juan Sorini y Guilherme Winter.
La llegada de Ofelia, fogosa y con un deseo sexual insaciable, pone en jaque la relación de los recién casados. Mientras que la mayor de las hermanas es puro fuego, Lucía goza observando a Ofelia.
El punto más flojo de la película de Kaplan está en las actuaciones. Por más belleza que ostente Pampita su trabajo está muy lejos de ser por lo menos pasable. Y Antonópulos también está en un registro que quizá no le queda cómodo.
Detrás del trabajo de los protagonistas parece haber una decisión de volverlas excesivas, rozando la sobreactuación, de ahí que el resultado pueda ser amado u odiado.
Pero más allá del lado en el que termine parándose el espectador, se puede decir que Desearás al hombre de tu hermana es una película arriesgada, que se jueba a odo o nada, y no dejará a nadie indiferente.