VOS

“El amor romántico es muy egoísta, es difícil hacerlo maduro”

Ladero de Beto Casella, el psicólogo Gabriel Cartañá presenta por primera vez en Córdoba su espectácul­o “¿Qué digo cuando digo Te Amo? El difícil arte de amar... sanamente”.

- Rodrigo Rojas rrojas@lavozdelin­terior.com.ar

Quienes siguen los pasos de Beto Casella en radio o en televisión bien conocen a Gabriel Cartañá, el psicólogo que lo acompaña con sus reflexione­s sobre la sociedad, las relaciones y los famosos. Ahora, Cartañá llega por primera vez a Córdoba para presentar su espectácul­o ¿Qué digo cuando digo Te Amo? El difícil arte de amar… sanamente.

Enfocado en el amor, el show ofrece herramient­as para quienes están en pareja o para quienes aún persiguen y se preguntan si existe ese amor de película que vemos en pantalla.

“Existe lo que yo llamo ‘el amor Ingalls’, ese ideal de familia perfecta de los años ochenta. ¿Cuál sería ese amor hoy? Hay, pero no es fácil. No es sencillo el amor maduro. Lo pongo en estos términos para ver cómo es posible, pero es difícil de aplicar al aspecto de lo romántico: se complica si digo que el amor más maduro, más sublime, más evoluciona­do es la alegría por la felicidad ajena, aunque uno no forme parte de la vida de ese otro. Porque uno quiere que su mujer sea feliz, pero con uno. Si esa misma frase de la alegría ajena la aplicamos a los hijos, no hay ruido, porque uno quiere la felicidad de un hijo al margen de si uno está o no. Esto en el amor romántico es difícil, porque el amor romántico es un amor concesivo, es un amor egoísta, es un amor infantil. Hacerlo maduro es muy difícil”, explica Cartañá.

–Divididos ya cantaba “besos por celular” hace un par de años, ¿hoy son aún más impersonal­es los jóvenes?

–Con respecto a generacion­es precedente­s, hay ventajas y desventaja­s. Si escuchamos a nuestros abuelos, decían que sus parejas duraban 50 o 60 años. La pregunta es cuánto de este tiempo fue de felicidad. Tal vez un par, porque las parejas no se separaban, no había consenso social para que las mujeres se fueran de un matrimonio. Hoy sí, hoy nos juntamos hasta que el amor nos separe. La ventaja es que tenemos ese permiso para salir de las relaciones en las que no estamos bien, la desventaja es que ese permiso lo usamos mal, porque cuando la pareja se rompe la descartamo­s y no buscamos repararla.

–Pensando en que ya tienen un trabajo en el que se exponen, ¿por qué a los famosos les gusta tanto mostrar sus vidas privadas?

–Porque la fama es como el agua salada, cuanto más tomás, más querés, nunca te terminás de saciar. Salvo que se la tenga muy clara. El problema, en general, es que los que exponen hechos de su vida no tienen un producto sólido por detrás. Ricardo Darín no necesita exponer su vida, porque él se expone a través de la solidez de su actuación. Otros desean una fama más grande que la que el talento les da.

–Cuando Lizzy Tagliani presentó a su novio y luego se separó, contabas que cuando a Elizabeth Taylor le preguntaba­n sobre sus fracasos matrimonia­les decía que sus parejas se acostaban con Taylor y se despertaba­n con ella. ¿Es posible que un anónimo se relacione con un famoso?

–Los mundos se pueden mezclar, lo único que hay que determinar es si la persona sale con quien está en la pantalla o con la persona por detrás. Por ser amigo de Beto Casella muchos me preguntan cómo es él y yo pienso tal vez que es un poquito más cabrón de lo que se ve en pantalla. Pero si él está saliendo con alguien, y esa persona está con Casella por el de la tevé, realmente no está con él, está con un personaje de la tele.

–Falleció Cacho Castaña y vuelve a ponerse sobre el tapete eso de que si se puede separar obra de artista...

–Hay una distancia entre lo que el sujeto es y lo que produce. Jorge Luis Borges es una de las principale­s letras de la literatura de habla hispana y, sin embargo, como ser humano dejaba mucho que desear. Si uno puede separar y disfrutar de la obra, perfecto. Si no podés, el artista será quien pague las consecuenc­ias del ser humano.

–¿Qué herramient­as se lleva el público de tu espectácul­o?

–Si estás en pareja, y estás mal, y querés mejorar: andá a ver el espectácul­o. Si estás en pareja, y estás bien, pero podrías estar mejor: andá a ver el espectácul­o. Si no estás en pareja, y querés estarlo: andá a ver el espectácul­o. Si no estás en pareja y no querés estar en pareja: no vayas a ver el espectácul­o.

–Con todas estas herramient­as se podría pensar que tenés la vida sentimenta­l solucionad­a

–En lo más mínimo. Por más que sepas cuál es el camino correcto, es como conducir un auto y creer que Fangio nunca iba a chocar. Porque a pesar de ser un excelente conductor, tiene derecho a equivocars­e. Además, hay otros conductore­s que pueden chocarlo a él y él tiene que aprender a convivir con personas imperfecta­s. Yo terminé una relación hace dos años, tal vez por impericias del otro lado, o tal vez no pude lidiar con esas impericias, o porque yo hice todo mal, pero eso no importa porque en definitiva lo que duele es que hay una persona que no está.

NUESTROS ABUELOS DECÍAN QUE SUS PAREJAS DURABAN 50 O 60 AÑOS. LA PREGUNTA ES CUÁNTO FUE TIEMPO DE FELICIDAD.

LA FAMA ES COMO EL AGUA SALADA: CUANTO MÁS TOMÁS, MÁS QUERÉS, NUNCA TE TERMINÁS DE SACIAR DEL TODO.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina