Cuando un viral se mete en las listas de éxitos
La cultura del sampling lleva décadas en la música, pero recién en los últimos años empezó a ser utilizada por artistas masivos. Lo que en su momento sugería algo vanguardista hoy es parte de la industria del entretenimiento. Para los que no están familiarizados con esta técnica, consiste en tomar un breve fragmento de una canción y emplearlo en otra, ligeramente manipulado, para resignificarlo. Tenemos como ejemplo paradigmático Hung Up, ese hitazo de Madonna que usa con maestría la base de Gimme!
Gimme! Gimme! de Abba; o lo que acaban de hacer Wos y su productor Evlay Beats con Luz
Delito, esa reinterpretación magnífica de uno de los riffs más icónicos de Los Redondos.
Ritmo, de los Black Eyed Peas y J Balvin, toma un hit de los ’90 y lo trae al presente como si viajara un Delorean plateado. La producción no sólo suena súper actual, sino que revela una nueva faceta de
The Rhythm of the Night, ese track de Corona que parecía condenado a las fiestas retro.
El resultado funciona en varios sentidos: un éxito rotundo –Ritmo va a sonar mucho este verano–, una utilidad concreta (forma parte de la banda sonora de Bad
Boys for Life) y una gran resignificación.
Que J Balvin diga en un momento “No son ni Reebook ni son Nike” también es cultura del sample: la frase de un viral aplicada a una canción popular habla de dos mundos que hoy conviven perfectamente.
EL NUEVO ÉXITO DE LA SOCIEDAD ENTRE J BALVIN Y BLACK EYED PEAS UTILIZA LA BASE DE UN CLÁSICO BAILABLE DE LA DÉCADA DE 1990.