Weekend

Las taruchas de Esther.

Sorpresas en Pueblo Esther, Santa Fe. Fuimos por doradillos y capturamos no solo esta especie, sino también tarariras y dientudos reales.

- Por Rodrigo García Cobas.

Sorpresas en Pueblo Esther, Santa Fe. Fuimos por doradillos y capturamos no solo esta especie, sino también dientudos reales y tarariras ¡en invierno!

Para la pesca en kayak de invierno, lo más importante es chequear bien que el clima sea propicio: vientos por debajo de los 15 km/h y que el cielo no esté nublado. Medios acobardado­s por el frío, vimos una ventana climática de muy poco viento y 20 ºC ¡en junio! Las condicione­s climáticas mejoraban hacia el norte de la provincia y todo lo contrario hacia el sur. No lo podíamos desaprovec­har. Charlamos con A riel Bobruk y decidimos ir por unos doradillos. Sin viajar muy lejos consideram­os hacer una excursión a Pueblo Esther. Prácticame­nte enfrente de la bajada náutica del Camping Municipal hay un grupo de islas que prometían buena diversión a 500 metros de distancia por el río Paraná.

Remontamos un kilómetro el curso calculando que la deriva nos permitiera llegar a las islas sin problemas. Las encaramos y tras unos minutos de remo intenso logramos acceder a ellas. Enseguida vimos algo de actividad. No pudimos descubrir qué era, pero un pez saltó fuera del agua. Emocionado­s, anclamos y preparamos equipos con distintos encarnes: anguila, mojarra, lombriz, sábalo y también con señuelos.

En el primer pique Ariel sacó un bagre amarillo chico pero muy gordo –deforme directamen­te–, encarnando con lom- briz. Decidió guardarlo para luego utilizarlo como carnada para el dorado. El pique se tranquiliz­ó y comenzamos a movernos por las islas, probando en distintos sectores, sin tener ni siquiera un pique o una corrida más. Observábam­os que las lanchas tampoco estaban pescando y decidimos abandonar la isla y retornar a la costa de donde habíamos partido.

Nuevo rumbo

Esta vez pusimos proa a l Monumento a los Caídos en la Gesta de Malvinas, siempre calculando la deriva que nos propicia el Paraná. Ahí hay un taller de reparación de buques. Por lo tanto, tenía que haber buena profundida­d y también reparo. Se formaba una corredera infernal y luego un reparo entre el taller y el club náutico que está a pocos metros. Ariel fondeó, pero esta vez hizo un i ntento a l pejer rey. Yo bajé unos metros y probé con señuelos buscando dorados, hasta que con uno tipo mojarra, lipless, pude atrapar un hermoso dientudo real.

Enseguida cambié de equipo por uno ultralight de 1-4 libras (1 libra: 453,592 gramos) para poder disfrutar más la pelea con estos hermosos dientudos. T uve in f i n id ad de at aques hasta que por VHF me llamó Ariel: “¡Vení! No sabés lo que

Pueblo Esther

Santa Fe

Ubicación: a 38 km al sudeste de Rosario, a 190 km de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y 150 km hacia el sudoeste de Paraná, Entre Ríos. El pueblo tiene una superficie de 20 km² y una altitud media de 14 msnm.

Precaución: en este punto el ancho del Paraná no supera los 2.500 m. Y con las islas en el medio no resulta complicado hacer el cruce completo desde un kayak. Pero hay que observar muy bien una vez pasadas las islas, porque es por ahí que cruza el canal donde circulan los buques, y ellos no nos ven a nosotros. pesqué”. Salí enseguida y al llegar no podía creerlo: tenía en el copo un taruchón de unos 3 kilos, hermoso, bien gordo y sano. “¿Pero vos no estabas pescando pejes?”, pregunté. Es que le habían destrozado la línea de pejerrey y cambió de modalidad.

Q ué g ra n sor presa pesca r tarariras en junio. Enseguida cambiamos de técnica, nos acercamos a los juncos y a pescarlas. Preferían lombriz; con señuelos no hubo forma, ni de superficie ni con artificial­es de goma rascando el fondo. Fueron varias capturas en el mismo lugar con línea de fondo de un anzuelo y encarnando con lombriz.

Sin hacer pausa, esperando el pique, nos dispusimos a comer unos sándwiches que llevamos preparados, tomamos algo de agua y también reforzamos el abrigo porque el viento había levantado un poco y ya el calor del rayo de sol no era tan fuerte. Hast a ese momento sólo teníamos puesta una remera. Con un chalequito de polar fue suficiente para estar cómodos y abrigados. También usamos calzas largas de 1,5 mm, medias de 4 mm y botas, todo de neoprene.

Sorpresa dorada

Mientras con una caña señueleaba, la otra estaba siempre en el agua con lombriz: solo el líder atado a la madre y un anzuelo número 4. De pronto percibo una corrida, sujeto firme la caña y clavo. Gran sorpresa al ver saltar fuera del agua un doradillo. Tanto los buscamos que al final pescando tarariras en un remanso apareció el doradillo. Tras su devolución los empezamos a buscar un poco más cerca de la corredera. Perdimos algunos piques, todos con carnada. Ya se había echo tarde para un día de invierno.

Al caer el sol decidimos concluir esta jornada de pesca en kayak de día completo. Tal vez lo tendríamos que haber hecho 15 minutos antes, pero la emoción de estar logrando una variadita

en kayak con un día primaveral en pleno junio, nos hizo estirar la decisión de cortar hasta último momento, cuando se empezó a sentir el frío de manera abrupta. Estábamos a minutos de la bajada, solo era dejarnos llevar por la corriente y esperar a que nos derive río abajo. Por supuesto no perdimos oportunida­d de seguir intentando al garete, tanto con señuelos co- mo con carnada, pero la pesca desde el kayak para nosotros ya había concluido y había que acepta rlo. Era la hora de sumarla a los muy buenos recuerdos.

 ??  ?? Arriba: doradillo pescado con lombriz; de buen color y bastante lastimado, segurament­e por dorados más grandes. Centro: hermoso paisaje de Esther, desde pescar por arboledas hasta por grandes barrancos. Der.: intento con el pejerrey usando mojarra viva...
Arriba: doradillo pescado con lombriz; de buen color y bastante lastimado, segurament­e por dorados más grandes. Centro: hermoso paisaje de Esther, desde pescar por arboledas hasta por grandes barrancos. Der.: intento con el pejerrey usando mojarra viva...
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Izq.: Ariel descubrió el point donde se escondían las tarariras y la primera fue la más grande. Arriba: dientudo real pescado con señuelo lipless, señal inequívoca para reducir equipos y disfrutar de una pesca ultralight bien picante.
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Holographi­c Shad 5 g Glimmer Shad 3 g
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Lipless Shad 9 g
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 ??  ?? Pesca de bagre amarillo, ideal para utilizar como carnada para el dorado.
Pesca de bagre amarillo, ideal para utilizar como carnada para el dorado.
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