Todo para descubrir
La Nueva, hermosa laguna del corredor de A2, reabrió sus puertas y ofrece robustos pejes en un ámbito exclusivo.
a los guías, o si no se efectúa un traslado de los pasajeros en 4x4. Son unos 30 km más (10 de ruta y 20 de tierra en dirección al Río de la Plata) los que nos separan de la estancia que incluye la laguna.
El primer impacto es sensorial: la tranquilidad del ámbito, de añosos árboles, solo es quebrada por el constante trinar de los pájaros y el ruido de animales de granja que habitan alrededor del casco. Luego, tras una barranca, aparece majestuosa la laguna, donde manaditas de carpinchos se dejan ver a respetable distancia y la avifauna invita al regodeo visual, maravillándonos con cisnes de cuello negro, espátulas, pollas de agua y demás. Haciendo un paneo visual por la superficie del espejo, sin dudas veremos la “V” de alguna nutria surcando mansa las aguas de La Nueva, un espejo que en todo su entorno rebosa de vida y naturaleza.
Comienza la pesca
Como todavía Luis Lynch, uno de los concesionarios, no había traído las truckers para trabajar el espejo, bajamos manualmente un bote para tres y cargamos l a s c aja s y c a ñ a s, a nsiosos de probar suerte en este tranquilo y bellísimo ámbito.
Ni bien pusimos en marcha el motorcito comenza mos a ver bulos de pejes en fuga, una buena señal. Anclamos a 200 metros de la costa, armamos caña de 4 m, reeles medianos cargados con multifilamento del 0,16 y aparejos de tres boyas simples, con brazoladas de 25 cm