El conmovedor homenaje de los hijos de Canapino en la pista de La Plata
Matías (20) debutó en el TC Mouras y su hermano Agustín ganó en el TC. Así honraron juntos a su padre.
La inesperada muerte por coronavirus, a los 57 años, de Alberto Canapino, una gloria del automovilismo argentino y un apellido muy ligado a la zona Oeste, enlutó al ambiente del deporte automotor. Y el último fin de semana generó una emoción importante en el TC Pista, donde al homenaje de su joven hijo Matías, que debutó en la categoría y salió octavo, se sumó el triunfo del ya consagrado Agustin, el mayor, en la carrera principal del TC. Así, ambos honraron el legado de su padre saludando juntos en lo más alto del podio.
Matías vivió 16 de sus 20 años en Ituzaingó y, siguiendo la tradición familiar, corrió su primera carrera en la categoría a menos de una semana del fallecimiento de su papá, uno de los mejores preparadores de autos de competición del país, víctima de un cuadro de COVID-19 que el lunes 15 le costó la vida en una clínica porteña.
#PorSiempreAlberto fue el lema que eligió el equipo RusMed para la carrera en el autódromo de La Plata y recordar a su gran precursor. Matías obtuvo el octavo lugar, pero el resultado era lo de menos: lo importante fue bajar del auto y agradecerle a su padre todo lo que le enseñó. "Una carrera medio loca, pudimos avanzar, pudimos aprovechar lo que pasó en pista y sacar un buen resultado. Quiero dedicársela a mi viejo que me ha dado todo, esta carrera es para el ", dijo luego de sacarse el casco.
La primera clasificación del año se la llevó su hermano, Agustín Canapino, en una jornada especial para su familia. Salió primero en la el Turismo Carretera. El equipo RusMed, que se lanzó hace pocos días, se llenó de lagrimas y protagonizó un momento inolvidables para los presentes en la carrera. "Sos tan genio que seguís ganando desde el cielo", publicó Agustín en un posteo de Instagram.
“Como hubiera querido mi papa, y en su honor, este fin de semana estaré corriendo mi primera carrera en #TC pista. Gracias a todos por el apoyo incondicional en este momento tan duro para mi, para mi familia y para mi equipo.”, habia publicado en los días previos el menor de los Canapino en sus redes para anunciar su debutTres días antes del fallecimiento de Alberto, presentó la flamante Chevy #68 que piloteó en La Plata y ya entonces le había reconocido a su padre el apoyo y acompañamiento para esta nueva etapa.
El menor de los Canapino, una familia muy reconocida en Ituzaingo, se propuso desde muy chico seguir el legado de su familia, dedicando largas horas al volante. Como muchos, empezó compitiendo en kartings, luego en Fórmula y ahora llegó al TC Pista Mouras.
Su hermano, Agustín Canapino, tambíen le escribió unas palabras a su padre, "Te fuiste en tu mejor momento personal y profesional, que injusto, todo tan rápido como tu mama, mi querida abuelita, solo hace 5 meses casi igual que con vos, de un día para otro cuando estaba todo bien. Te prometo que voy a seguir, no sé como porque vos eras el director de toda la orquesta, y el mejor director que podía haber, pero de alguna manera voy a seguir, como pueda. Hay mucha gente que me va a ayudar porque ni vos sabés la cantidad de gente que ayudaste y enseñaste en este deporte que era tu vida, nuestro amado automovilismo...", escribió su hijo Agustín Canapino, desde su cuenta de instagram.
Alberto nació el 23 de Mayo de 1963 y se lució en categorías como el viejo TC2000 y el Turismo Carretera. Comenzó con preparación de vehículos de competición, y corrió con una moto Honda en el Campeonato Argentino de Velocidad de 125 cc.
Además, desarrolló un sistema de suspensión para monopostos. Quienes lo conocieron bien, siempre contaron que Alberto iba siempre en busca de la innovación. Canapino fue un talentoso que llamó la atención de muchas personas del ambiente del automovilismo y tras ver su capacidad, sus logros lo llevaron a ser director deportivo del TC2000. ■