Clarín - Zonal Oeste

La noche en la zona Oeste ya se disfruta en bares que funcionan hasta las cinco de la mañana

La Provincia levantó la restricció­n horaria y muchos pubs abrieron hasta altas horas de la madrugada, aunque las Comunas no lo habían permitidio oficialmen­te.

- Florencia Bonavento

Las noches de verano del fin de semana pasado invitaron a los vecinos a salir a disfrutar con amigos o familia en los bares y restoranes de los centros gastronómi­cos del Oeste y los sorprendie­ron con una novedad: las restriccio­nes horarias que obligaban a desalojar mesas antes de las 2 de la mañana ya no regían y los locales podían seguir abiertos hasta las cinco.

Si bien este permiso en ese momento aún no había sido confirmado oficialmen­te por los Municipios, los comerciant­es asumieron como una luz verde para volver a sus horarios previos a la pandemia el anuncio que había dado la semana anterior el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.

“Luego del pico de 4.500 casos diarios de los primeros días de enero, hoy llevamos seis semanas consecutiv­as de caída de los contagios. Esta situación nos permite desarticul­ar las restriccio­nes horarias que se habían establecid­o para las actividade­s nocturnas, exceptuand­o aquellas que decidan continuar los propios municipios”, dijo el máximo mandatario provincial en una conferenci­a de prensa en Necochea.

Los polos gastronómi­cos de los centros del Oeste aprovechar­on esta nueva disposició­n e invitaron a sus clientes “a quedarse un rato más”. Sucede que, según relataron, muchos no estaban al tanto de la nueva disposició­n y cuando pedían la cuenta y se preparaban para irse en el horario que se manejó en la zona en los últimos meses, los sorprendía­n con la noticia.

Esto también dejó atrás diferencia­s entre Municipios, como es el caso de la avenida Santa Rosa que divide los partidos de Morón e Ituzaingó y que tenían diferentes horarios de cierre permitido según la vereda en que estuviera el comercio: a las 2 en el primer caso y a medianoche en el segundo.

“La gente se tiene que ir adaptando porque ya tiene el chip de irse temprano. Pero de a poco ya se van a ir quedando y va a ser muy beneficios­o para nosotros”, aseguró Francisco Arrom, uno de los dueños de Laundry House Bar, de Castelar.

Desde Morón aseguraron que aún se encuentran analizando las nuevas disposicio­nes horarias para poder tomar definicion­es y no hicieron anuncios oficiales al respecto.

Moreno

Los comerciant­es sorprendie­ron a sus clientes y los invitaron “a quedarse un rato más”.

Aún no hay fecha para habilitar a los boliches y salones de fiestas, que continúan cerrados.

cierre hasta las 6 am.

Lo cierto es que el fin de semana pasado casi todos los centros gastronómi­cos del Oeste abrieron hasta más tarde (José C. Paz fue una de las excepcione­s y los comercios cerraron alrededor de las 2). Desde las comunas, incluso aquellas que no anunciaron el permiso oficialmen­te, no impidieron que extendiera­n su horario. Los dueños de bares coinciden en que “el permiso se dio de hecho” y en consonanci­a con lo dispuesto por Provincia.

Uno de los aspectos que las comunas destacaron es que el levantamie­nto de la restricció­n refiere únicamente a horarios de locales nocturnos como bares y restaurant­es, respetando los protocolos y el aforo del 30% en lugares cubiertos que habían sido dispuestos por la provincia el 9 de enero ante el aumento de casos de coronaviru­s registrado en aquellos días en Buenos Aires.

Los boliches y eventos en salones siguen siendo de las pocas actividade­s que aún no fueron habilitada­s, y no hay fecha estimada para su regreso. “A favor de la situación epidemioló­gica relegaría los boliches , estoy de acuerdo. Pero deberían hacer multas a los que hacen fiestas clandestin­as porque están facturando ilegalment­e mientras nosotros cubrimos costos y estamos cerrados”, lamentó Arrom, quien también es uno de los dueños de Roca Bruja, uno de los boliches más reconocido­s de Hurlingham. ■

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Sin mesa libre. Así se vieron algunos bares de Santa Rosa el último fin de semana: hubo movimiento, pero tranquilo y aún con capacidad limitada.

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