Panza de Oro llega por quinta vez a Cochabamba.
El Festival Transfronterizo de Poesía tuvo un avance en el Internacional de la Cultura en Sucre
Del 2 al 5 de octubre, se realizará en diferentes espacios de Cochabamba incluyendo el Instituto audiológico Fe y Alegría y la cárcel San Sebastián mujeres, entre otros.
Cualquiera que sea el fallo de la Corte Internacional de la Haya, sobre la demanda marítima interpuesta por Bolivia a Chile, lo cierto es que los vínculos entre estos dos países suceden en niveles mucho más complejos y diversos que el de la diplomacia gubernamental. Las decisiones que se toman en las capitales, llegan apenas como un papeleo a la hora de cruzar la frontera, lugar donde realmente ocurren los intercambios. Las rutas y los flujos de las personas tienen un ritmo y una magnitud que va más allá de las regulaciones estatales.
Así como un comerciante de la cancha viaja cada quincena a Iquique a comprar mercadería, escritores chilenos y bolivianos van y vienen a festivales y encuentros. Los movimientos de la cultura son los que menos parecen importar a la hora de entender la relación entre países vecinos, sin embargo, esta relación — inversamente proporcional a la diplomacia oficial—, se nutre y robustece con el pasar de los años.
Desde hace décadas el interés por crear vínculos entre Bolivia y Chile ha llevado a artistas y gestores a proponer una serie de iniciativas que nos permitan una relectura de lo que somos y de cómo nos entendemos. Entre ellos el Festival de Poesía Transfronteriza “Panza de Oro” que realiza este año su quinta versión consecutiva.
Este festival tiene una trayectoria que no es menor y que, desde el inicio, ha involucrado la presencia de poetas de diversos países, entre ellos un importante grupo de escritores chilenos. Por otra parte, pero no de forma desvinculada, también este año, Bolivia será el país invitado en la Feria Independiente del Libro de Valparaíso, a realizarse durante la segunda quincena de diciembre en el vecino país. En el marco de este último evento, ocho poetas bolivianos — Juan Cristóbal Maclean, Anahí Maya Garvizu, Roberto Oropeza, Milenka Torrico, Edgar Soliz, José Laura, Rocío Ágreda e Iris Killa—, viajarán y serán parte de lecturas y presentaciones de libros, representando las nuevas letras poéticas bolivianas.
Tanto el Festival “Panza de Oro” como la Feria Independiente del Libro de Valparaíso son iniciativas que parten de la autogestión, impulsadas por grupos de personas que no pertenecen a las instituciones ofi- ciales o gubernamentales de sus países, pero que, no obstante, conocen el trabajo literario de sus vecinos y se sumergen en las turbulencias de la gestión cultural independiente, para ponerlo en valor. Y que persiguen un diálogo y un intercambio que se viene realizando desde hace casi dos décadas y que ha cobrado fuerza en los últimos 10 años.
Los encuentros y los festivales han sido desde siempre los espacios donde los autores se ven personalmente, se contaminan ( en el mejor sentido de la palabra) y donde se alimentan de nuevas lecturas que muchas veces derivan en publicaciones varias. Encuentros como el Tea Party, Santiago en Paz, en su momento Poquita Fe, Panza de Oro y los recientes Matute y Sudaka, se han transformado en puntos importantes donde la literatura y, en particular, la poesía, en- cuentra un espacio valioso de intercambio.
Numerosos libros de poetas bolivianos han sido publicados en Chile y viceversa. Las antologías han sido, particularmente, las formas de mostrar la producción poética entre vecinos. Resulta arduo, si no imposible, rastrear el origen mismo de este interés mutuo, pero nos arriesgaremos a nombrar tres publicaciones que dan cuenta de las repercusiones que estos encuentros han logrado.
En 1993 Humberto Quino publica Álbum de la nueva poesía chilena, un libro que contiene una serie de poemas y biografías de poetas chilenos, entonces casi desconocidos en Bolivia. Sólo unos años después, Jessica Freudenthal era invitada al Festival Poquita Fe en Chile. La publicación en 2008 de Yerba Mala Cartonera Chile made in Bolivia, con la que se iniciaría una relación que derivaría después en la creación de la Ubre Amarga de Proyecto mARTade-ro, grupo gestor del actual Festival Panza de Oro. Y Ulupica en 2017, antología de jóvenes escritores bolivianos, publicados por Libros del Cardo. Esta propuesta reúne a nuevos poetas nacionales que forman parte del grupo invitado a la Feria Independiente del Libro de Valparaíso.
Siendo la literatura chilena un referente de la poesía a nivel mundial, muchos poetas bolivianos que se tomaron seriamente el oficio de la escritura, estrecharon lazos de diversas formas con Chile a partir de la poesía. No es de extrañar que algunas poetas como Marcia Mogro, Emma Villazón, Claudia Vaca, etc. hayan cambiado su residencia a ese país con fines formativos vinculados a la escritura.