Temperatura ideal
Junto con elegir el equipo que temperará de mejor manera nuestros hogares, es necesario considerar antes aspectos como tener una aislación térmica adecuada en la vivienda, adoptar sencillas medidas para evitar fugas de calor en puertas o ventanas y tambié
Consejos para mantener la temperatura adecuada.
En el contexto de las temperaturas frías del otoño y del invierno, la aislación de una vivienda se puede representar como la chaqueta térmica para una persona. Mientras más aislación tenga la chaqueta tendremos menos frío, porque permite una menor pérdida de calor del cuerpo. “En una vivienda es similar, mientras tenga una mayor aislación térmica requeriremos menos uso de calefacción al interior e incluso podríamos no necesitar calefacción. Por supuesto, esto depende además del diseño de la vivienda y las condiciones climáticas”, explica el ingeniero civil Hernán Madrid.
En ese sentido, el aislamiento térmico es fundamental para la eficiencia energética en el hogar. Por ello, pequeñas cambios pueden generar ahorros energéticos y económicos de hasta 30% en calefacción. Por ejemplo, el aislamiento de puertas y ventanas puede representar entre 10 y 25% de la cuenta del sistema de energía que usemos para calefaccionar.
“Esto se puede lograr con acciones simples y de bajo costo, ya que muchas veces solo necesitamos silicona o masilla. Además, hay variados productos disponibles en el mercado para tales efectos, como huinchas adhesivas plásticas. Una buena aislación nos permitirá aprovechar al máximo la calefacción en los días de menor temperatura”, explica Doménico Pescara, director de Carreras Vespertinas de Construcción de Duoc UC Valparaíso. Claves a considerar
Doménico Pescara precisa que es necesario escoger bien el lugar donde se debe instalar el artefacto, para poder abarcar un mayor espacio de calefacción. En ese sentido, “se debe tomar en cuenta las características del ambiente a calefaccionar, así como el tamaño de la habitación. Cada estufa viene dimensionada para una cierta cantidad de m2, factor que no se considera generalmente”, sostiene.
Y añade que “es importante considerar el número de habitantes de la morada. Y si hay niños, está claro que existe un alto riesgo de quemaduras, por lo que la seguridad que nos proporciona el sistema de calefacción elegido debe ser prioritaria”.
Asimismo, para decidir qué equipo comprar, hay que comprender el comportamiento de la temperatura y como se distribuye en el ambiente.
“El calor fluye desde el punto más caliente hacia el más frío, y siempre la temperatura alta con la baja buscarán llegar a una temperatura de equilibrio. Es por esta razón que la principal causa del gasto energético se produce por el desinterés en el aislamiento térmico, por ejemplo, en ventanales puertas y paredes”, especifica. Por ello, si se logra controlar la fuga de calor, es posible utilizar un método más económico para calefacción.
“Si queremos un equipo de gran potencia para la calefacción de toda la casa o varios pequeños en distintas habitaciones, dependerá en gran manera de la distribución de los espacios; sin embargo, disminuir costos en calefacción, solucionar las fugas de calor y utilizar calefactores pequeños según la necesidad, en un mediano plazo generará un ahorro importante”, comenta el académico de Duoc UC Valparaíso.
A juicio de Hernán Madrid, también lo relevante es que la aislación se encuentre bien instalada y sea continua, además de tener cuidado con las infiltraciones de aire, las que “debido al paso de aire no controlado (no es lo mismo que la ventilación) involucra una gran pérdida de calor”.