Avances en biotecnología forestal, ingeniería genética y bioseguridad, entre otros.
Plantaciones con crecimientos más rápidos y resistencia a factores ambientales son parte de las líneas de investigación en esta materia. La preocupación de sectores por árboles transgénicos, si bien una realidad en otros lugares del mundo, en Chile no se
La biotecnología en la industria forestal es fundamental a la hora de hablar de competitividad. Los avances en esta materia, han posibilitado mejorar la productividad y rendimiento de las plantaciones, a través de, por ejemplo, la aceleración de las tasas de crecimiento o la resistencia a estrés biótico (como plagas) y abiótico (como las heladas). María Paz Molina, investigadora del Instituto Forestal (INFOR), asegura que utilizando los avances de la genética vegetal, ingeniería genética y las tecnologías de multiplicación vegetativa, se ha logrado mejorar el entendimiento del control genético de las especies forestales sobre los atributos económicamente importantes, “permitiendo responder interrogantes relacionadas con el crecimiento, fisiología del desarrollo e interacción con el ambiente, y ha permitido el desarrollo de métodos de selección temprana de individuos superiores basado en su genética, disminuyendo así la gran escala temporal que impone la genética clásica para la selección de especies forestales, cuyos ciclos de crecimiento comúnmente son extensos”.
En nuestro país, la investigación en biotecnología está centrada en lo que hacen las grandes empresas forestales como Arauco (a través de Bioforest) y Forestal Mininco del Holding CMPC, en el marco de sus programas operacionales. “En estos casos, se está desarrollando una línea que apunta a masificar, a través de cultivo in vitro de árboles, clones específicamente que tienen buenas características de crecimiento y buenas características adaptación a condiciones ambientales limitantes, particularmente heladas”, indica Fernando Guerra, académico de la Universidad de Talca.
Por otro lado, afirma que Arauco tiene una línea que apunta a desarrollar la selección basada en genómica, selección de árboles superiores para abastecer todas sus plantaciones. “En ese sentido, están desarrollando modelos estadísticos que utilizando información del genoma de pino radiata, les permite predecir la superioridad genética de los individuos que van a utilizar para establecer sus plantaciones mejoradas”.
María Paz Molina, indica que en cuanto a algunas investigaciones aplicadas, “por hoy se conocen hongos y bacterias que son capaces de degradar algunas macromoléculas de la madera tales como la lignina, dejando solo la fracción útil que es la celulosa (biopulpaje), utilizando los mismos microorganismos se puede blanquear la pulpa (bioblanqueo), sin la necesidad de utilizar elementos químicos poco amigables con el medio ambiente, con la salud humana y de alto costo de manejo y eliminación”. Sin embargo, a pesar de que estos estudios se conocen desde los años 80, a la fecha no es clara la factibilidad de su aplicación operativa.
El área de genómica forestal del Centro de Biotecnología de la Universidad de Concepción ha trabajado en conjunto con empresas forestales para estudiar genes en eucaliptos que responden a condiciones de estrés abiótico (sequía, temperaturas extremas) dado el escenario de cambio climático para el país. “Actualmente, el ciclo de mejoramiento de eucalipto puede tardar hasta 12 años, si empleamos herramientas biotecnológicas basadas en ADN podríamos llegar a ciclos de 4 años, para seleccionar a los mejores parentales”, asegura la Dra. Sofía Valenzuela, académica e investigadora del centro. Además, se encuentran participando en una iniciativa internacional para poder desarrollar un chip basado en diferencias mínimas en el genoma de pino. “Esto permitirá en el mediano plazo realizar lo que conocemos como modelos genómicos y así poder tomar una muestra de una plántula de pino y predecir cuál será su rendimiento (volumen, densidad, contenido de celulosa, entre otros)”.
El área de genómica forestal del Centro de Biotecnología de la Universidad de Concepción ha trabajado en conjunto con empresas forestales para estudiar genes en eucaliptos que responden a condiciones de estrés abiótico (sequía, temperaturas extremas) dado el escenario de cambio climático para el país.