GRANDES EXPERIENCIAS
Andrea Novoa sabía que hacer un curso de inglés no solo mejoraría lo ya aprendido en el colegio, sino que sería una gran herramienta a la hora desarrollarse profesionalmente. Con 30 años y una incipiente carrera como ingeniera comercial en una empresa dedicada a la venta de insumos, Andrea optó hace dos años por realizar un curso de inglés intensivo. “Aprendí mucho más vocabulario y a desenvolverme sin problemas hablando inglés. Antes me costaba entablar una conversación porque me sentía insegura, pero el curso me entregaron las herramientas necesarias, las que me han ayudado en mi actual trabajo. Por ejemplo, ahora yo soy la que tiene relación directa con algunos clientes extranjeros y soy responsable de algunos proyectos que requieren un buen manejo del idioma”, expresa Andrea.
Agustín Morales es un periodista de 29 años. Ejerció durante dos años a cargo de las comunicaciones de una editorial, hasta que tuvo ganas de conocer el mundo y decidió postular para trabajar en un crucero internacional.
“Para cumplir ese sueño tenía que prepararme y por eso me inscribí en un curso de inglés por seis meses. Durante todo ese tiempo seguí trabajando y compatibilicé mis tiempos, porque además de poder viajar, sabía que el inglés me serviría para más adelante en mi carrera”, cuenta. Luego de terminar el curso, participó en el proceso de selección del trabajo en el crucero y quedó. Tras recorrer varios países durante ocho meses, volvió a Chile y hace tres meses retomó su antiguo cargo.