Los ejes de los principios rectores
Los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos establecen un protocolo para su implementación, que se basa en tres pilares fundamentales.
Deber del Estado de proteger los DD.HH.: “Al ratificar tratados internacionales sobre convenciones de derechos humanos se establece el deber de proteger a la gente de terceras personas. No solamente de los estados, los cuales deberían protegerlos en primer lugar, sino también de terceras personas incluyendo negocios. El primer pilar se enfoca en los aspectos de legislación y regulación que el estado debería adoptar”. Responsabilidad empresarial de respetar los DD.HH.: “La única manera de saber que no estás vulnerando derechos humanos es implementar prácticas adecuadas, esa es la herramienta que te permite saber cuándo y dónde existe un impacto.
Si eres la causa de ese impacto entonces es tu deber contribuir en la solución. Es una argumento muy claro”.
Acceso a una compensación si los derechos no son respetados: “Todo el tema de remediar y el acceso a justicia sigue siendo el aspecto más complicado. Una de las cosas que hicimos, además de motivar a los sistemas judiciales a operar de manera más efectiva, es motivar a las empresas junto a las comunidades a establecer mecanismos no judiciales. Cuando la violación a los derechos humanos no es de riesgo vital pero tiene que ver con daños materiales, una vivienda por ejemplo, hay una unidad local no judicial disponible a quien se le puede realizar el reclamo”.