Una hoja de ruta hacia la industria 4.0
El mundo económicamente interconectado atraviesa por una cuarta revolución industrial. El país requiere consolidar y aumentar ventajas competitivas incorporando a la industria nacional nuevas tecnologías y capital humano especializado.
El futuro mediato es desafiante y presenta grandes oportunidades, tanto para las nuevas generaciones como para sus formadores. Tecnologías disruptivas como la automatización inteligente, la nanotecnología, el big data, la inteligencia artificial y robótica amenazan la subsistencia de 3,2 millones de empleos altamente automatizables en los próximos 20 a 40 años, pero crean también nuevas oportunidades laborales para las cuales no nos estamos preparando.
Las empresas deben, por lo tanto, seguir siendo artífices del proceso de complejización económica que arrancó a fines de los 90, diversificando la matriz productiva y potenciando la creación de valor agregado, llevando a que actividades de sectores extractivos tengan actualmente una participación del PIB de apenas 20%, mientras que la prestación de servicios profesionales y empresariales de alto contenido técnico y tecnológico alcanza ya 51%. Tenemos, no obstante, la necesidad de aumentar la cantidad de bienes producidos y exportados y su valor añadido y sofisticación para escalar posiciones en el Ranking de Complejidad Económica de la Universidad de Harvard (ECI) que el año 2016 nos ubicó en el puesto 64 a nivel mundial. Las empresas y el Estado deben entonces apostar conjunta y coordinadamente por la tecnificación y especialización en la producción a través de la implementación de políticas públicas que potencien las carreras técnicas y el desarrollo e investigación en ciencia y tecnología, tal como lo hicieron países como Japón, Suiza y Alemania que lideran este ranking. No invertir en buenas políticas públicas que potencien y fomenten la educación, capacitación e investigación en estas innovaciones tecnológicas llevará en definitiva a aumentar la desigualdad salarial pues no existirá suficiente oferta laboral para el manejo de tecnologías que son altamente demandantes de capital humano avanzado y técnico. Pasos concretos Por esta razón, SOFOFA está dando pasos concretos para hacer de Chile un país más competitivo y preparado para abordar los múltiples cambios normativos que se requieren en educación, capacitación, investigación e innovación, especialmente en áreas tecnológicas, articulando iniciativas colaborativas con el sector público. Junto con ACTI, Corfo, los Ministerios de Hacienda, Economía y Educación y el Comité de Transformación Digital estamos diseñando una hoja de ruta para potenciar las carreras ligadas a las tecnologías de información y comunicación (TIC), acelerar la transformación digital de la industria e incentivar la capacitación actualizando los perfiles de cargos empresariales. A través de esta alianza buscamos conectar la educación técnica de nivel medio con la superior, determinar la brecha existente entre la formación actual y el mundo del trabajo, conocer la demanda de la industria por capital humano especializado, y alinear los contenidos que hoy imparten las instituciones de formación con los requerimientos del mercado laboral. Y es que preparar a los futuros técnicos y profesionales para los nuevos desafíos empresariales es una tarea que involucra tanto a los gremios de todos los sectores económicos, como al sistema educativo, desde la básica hasta la educación superior.
Sin embargo, el éxito de este proceso dependerá finalmente de la voluntad de jóvenes, hombres y mujeres, en cuanto se decidan a estudiar carreras ligadas al uso de estas tecnologías de frontera en el contexto nacional. Y si bien estudiar una carrera relacionada a estas áreas requiere de esfuerzo, creemos que de la mano de las empresas de la industria -que deben adaptarse constantemente a las exigencias del mundo globalizado- contaremos con la posibilidad de institucionalizar uno de los ejes más relevantes para el desarrollo sostenible del país.
“Preparar a los futuros técnicos y profesionales para los nuevos desafíos empresariales es una tarea que involucra tanto a los gremios de todos los sectores económicos, como al sistema educativo, desde la básica hasta la educación superior”. “El futuro mediato es desafiante y presenta grandes oportunidades tanto para las nuevas generaciones como para sus formadores”.