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Las ventajas del e-learning y los programas de educación online.
Hoy en día, cuando se habla de educación online, e-learning o virtual ya no existe diferencia entre ellas. Se asume que es un proceso de enseñanza que se desarrolla a través de plataformas digitales con una conexión a internet. Y en Chile ha ido ganando terreno poco a poco. Según cifras del Ministerio de Educación, 2,1% del total de alumnos cursando una carrera de educación superior lo hace a distancia, y 0,6% en modalidad semipresencial.
Para Daniel González, vicerrector de Admisión y Comunicaciones del Instituto Profesional IACC, “esta modalidad de enseñanza se diferencia de la modalidad presencial tradicional, aunque parezca obvio en que no se necesita asistir al centro de estudio a realizar el proceso de enseñanza y aprendizaje, y que ofrece la posibilidad de ajustarse al horario de los estudiantes. En el caso de la educación presencial hay un lugar y horario definido que debe respetarse”, indica. En esta otra modalidad, “el estudiante debe tener un rol muy activo, en que es autónomo y protagonista de su avance, al ritmo de estudio que requiera”.
Generalmente, los programas de e-learning están dirigidos a ciertas áreas como por ejemplo, escuelas de administración, educación y capacidades transversales, desarrollo social, procesos industriales e informática. Sin embargo, no quiere decir que en un futuro se exploren otras áreas para implementar esta forma de enseñanza. “Hoy Chile vería como imposible implementar carreras como técnico en enfermería, técnico en construcción, o las carreras profesionales de estas mismas carreras técnicas, pero en Estados Unidos estás áreas ya se imparten en modalidad online”, sostiene González.
Pero, ¿existe alguna diferencia en el aprendizaje entre la forma presencial y online?
Daniel González plantea que se debe poner en paralelo que tanto la educación presencial como la online, “de acuerdo a sus metodologías y procesos, logran producir aprendizajes significativos tanto a nivel de conocimientos como en desarrollo de competencias para el mundo productivo, por tanto ambas modalidades son tan válidas, que es lo que se ha demostrado en los países, donde la modalidad online tiene una mayor participación en los sistemas de educación superior”, dice.
Uno de los desafíos para los sistemas de e-learning es la formación de docentes para adaptarlos y habilitarlos a esta modalidad de enseñanza. También, “la construcción de las asignaturas, ya que no sólo basta el programa de estudios como lo es usualmente en la modalidad presencial, sino que se requiere contar con todo el programa construido, lo que exige tener a un equipo de profesionales expertos, diseñadores instruccionales, curriculares, que en la presencialidad no se requieren con esta intensidad”, sostiene González.