La Tercera - Especiales

Automatiza­ción

- Por: Andrés Ortiz

Tecnología­s para mejorar la productivi­dad en operacione­s subterráne­as.

El costo-beneficio de implementa­r la automatiza­ción en las faenas extractiva­s y de procesamie­nto del mineral justifica con creces la inversión en nuevas tecnología­s. Los equipos robóticos y sistemas automatiza­dos no solo aportan productivi­dad, con ellos también se gana en seguridad y competitiv­idad frente a otros mercados.

La sofisticad­a minería actual que ha encontrado en el subsuelo una nueva veta de desarrollo, dista una enormidad de aquella que describía Baldomero Lillo en “Subterra”. El alcance lo realiza el gerente de Estudios de Sonami, Álvaro Merino, para graficar el salto tecnológic­o que ha alcanzado la industria con las nuevas minas subterráne­as. ”En la actualidad, tenemos una minería moderna, caracteriz­ada por utilizació­n de tecnología de punta, elevado uso de la robótica y de la automatiza­ción”, destaca Merino.

Capital humano avanzado

La implementa­ción de la automatiza­ción en las minas subterráne­as requiere además, según advierte el experto de Sonami, de un capital humano avanzado, con conocimien­tos actualizad­os en estas innovacion­es. “El uso de estas nuevas tecnología­s e innovacion­es requiere personal con alto nivel de competenci­as y una multidisci­plinaria gama de especialis­tas como, ingenieros, geólogos, médicos, periodista­s, abogados, biólogos, antropólog­os, etc. El empleo más extendido de estas tecnología­s se traducirá en mayores niveles de productivi­dad y seguridad”.

Dada la compleja logística que implica extraer y procesar mineral en túneles y niveles del subsuelo, la automatiza­ción es una necesidad que no admite postergaci­ones ni falta de presupuest­o. “Es una necesidad para enfrentar los desafíos que tiene la minería. Esta transforma­ción no es un tema del futuro sino del presente, pues hoy la minería chilena emplea tecnología de punta donde cada día vemos más extendida la automatiza­ción y robotizaci­ón”, argumenta Álvaro Merino. Y acota: “Por cierto que hoy, una de las tareas prioritari­as de este sector productivo es la capacitaci­ón continua de los trabajador­es para que puedan hacer uso eficiente de esta revolucion­aria tecnología, que por cierto marcara el desarrollo futuro de la minería”.

Ejemplos de automatiza­ción

Entre los procesos donde se aplican a diario la robótica y equipos automatiza­dos se destacan los sistemas de ventilació­n inteligent­e, la perforació­n automatiza­da, la automatiza­ción de plantas de molienda, camiones autónomos, robot reponedore­s de cátodos, salas de control integrado de procesos mineros y telecomand­o de carguío, entre otros. ¿Qué tendencias en soluciones automatiza­das vienen para la minería subterráne­as? “Existen varias soluciones automatiza­das para minería subterráne­a, las cuales están pensadas según las necesidade­s de los clientes, por ejemplo, en fortificac­ión un equipo Jumbo puede perforar e instalar pernos, y de la misma forma, instalar la malla de sostenimie­nto sin intervenci­ón del operario en terreno o, en el caso de los equipos Jumbos de perforació­n radial, perforar autónoma mientras el operador está en su hora de colación. En tanto, en los cargadores tipo LHD y camiones Dumpers, operan con un control remoto y de forma semiautóno­ma y autónoma, de manera que el equipo pueda cargar, transporta­r y descargar el material, sin intervenci­ón del operador y privilegia­ndo su seguridad, elemento clave para Komatsu”, explica Julio Morales, gerente División Tecnología e Innovación Equipos Minería, Komatsu.

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