Infraestructura en crecimiento
Una buena red de estaciones de carga es fundamental para el desarrollo del mercado de vehículos eléctricos. Hoy existen 25 electrolineras públicas en Chile, pero se espera que ese número aumente considerablemente en los próximos años.
Se les llama electrolineras para asociarlas con la tendencia de la electromovilidad, y en referencia también a las tradicionales gasolineras que desde el siglo XX han surtido de combustible a los vehículos de combustión interna. Actualmente en Chile, se encuentran habilitados 25 puntos de carga para autos eléctricos, 20 en Santiago, cuatro en la Quinta Región y uno en Concepción, la mayoría instaladas por la firma Enel.
Precisamente, esta compañía es la que ha impulsado el plan “Ruta Chile de Electrolineras”, que en los próximos cinco años tiene como meta instalar 200 electrolineras adicionales, en las principales ciudades y carreteras del país. Con una mayor infraestructura de recarga, se podrá dar mayor movilidad territorial a los vehículos eléctricos, la que hoy se encuentra restringida a viajes entre Santiago y la Región de Valparaíso.
Recarga gratis, por ahora
“Por este año, no se si el próximo, estamos dando la energía gratis a los clientes que se conecten a estos cargadores. No cobramos ni tarificamos, pero sí le pedimos al cliente o dueño del auto eléctrico que tenga una tarjeta Enel para poder activar el cargador. La tarjeta es muy fácil de conseguir. El procedimiento se encuentra en la página web de Enel y allí se puede solicitar la credencial”, señala Karla Zapata, gerente de Enel X.
Desde 2010, la firma ha trabajado de manera coordinada con los Ministerios de Transporte y Energía para dotar al país con esta infraestrcutura indispensable para el crecimiento del parque automotor eléctrico e híbrido. “En conjunto hemos venido instalando cargadores como el que sirvió al primer bus eléctrico que circuló por el centro de Santiago. Después nos hemos ido expandiendo hacia municipios como Santiago, Vitacura y Las Condes”, cuenta la ejecutiva.
Según Zapata, los municipios proponen las locaciones y luego Enel realiza un estudio logístico del lugar, tomando en consideración el tránsito de vehículos y la facilidad espacial para realizar la recarga. En el caso de los buses del Transantiago, estos cuentan con puntos de carga en los terminales, como son los de Peñalolén y Maipú que pertenecen a la empresa Metbus.
Tipos de cargadores
En la actualidad, se pueden encontrar cargadores con diferentes niveles de potencia. Para las casas los más comunes son los cargadores que van desde 3.5 watts a 7 watts de potencia, que permiten cargar un auto entre cinco y siete horas. “Para carga pública puedes encontrar de 22 watts y los que están en estaciones de servicio que son de 50 watts. Todo va a depender del lugar donde está instalado, el uso que se le va a dar, en cuántas horas queremos que se cargue y si va a ser un auto o un bus el principal usuario”.
En el caso de cargadores para viviendas, la gerente de Enel afirma que es como instalar un electrodoméstico, porque lo conectas al tablero y comienzas a utilizar la potencia y energía que viene del empalme del domicilio. “El cargador de una casa es como tener un calefactor, por decirlo así, especialmente para que funcione en la noche. El modelo ideal es que la gente que tiene un auto eléctrico llegue a su domicilio y que mientras duerme cargue el auto”.
Actualmente, existen unos 150 puntos de carga en domicilios privados. Existen adaptadores especiales que permiten conectar el auto a los enchufes normales de la casa, pero la carga se realiza a un ritmo mucho más lento. El costo de los cargadores domiciliarios, más el servicio de instalación, es de aproximadamente $ 1,3 millón.
Otro sector que se está sumando al desarrollo del transporte eléctrico es el inmobiliario. Empresas como Simonetti y Almagro han comenzado a diseñar sus edificios con infraestructura para autos eléctricos, para que los dueños de departamentos puedan enchufar sus autos en sus propios estacionamientos.