EL POSTGRADO QUE LA ACERCÓ AL EMPRENDIMIENTO
En 2006, se tituló de la carrera de ingeniería civil en medio ambiente y de un diplomado en gestión ambiental. Un año después hizo lo mismo, pero con un postítulo en gerencia pública. Ese año sería crucial en la vida de Carla Saldías (37), quien encauzó su vocación inicial por otra área. Durante 2010 inició un magíster en innovación tecnológica y emprendimiento, del cual se tituló en 2013. “Cuando uno estudia la carrera de pregrado no siempre tiene claro a lo que se quiere dedicar. En cambio, cuando empecé a trabajar, me di cuenta, que lo mío era el ámbito de la innovación y el magíster me permitió poder hacer cambios importantes donde estaba trabajando en ese momento”, dice.
Otra de las ventajas que Carla destaca sobre su decisión de cursar un postgrado es que, a diferencia del pregrado, estos programas permiten conocer a gente diversa, con distintos intereses y realidades. “Hice buenas redes de contacto y aprendí muchísimo”, resalta con énfasis.
Producto de su magíster pudo viajar a Silicon Valley, en Estados Unidos, donde adquirió conocimientos relevantes en todo lo relacionado con el emprendimiento. Cuando regresó a Chile se desempeñó durante cuatro años en una fundación donde le tocó aterrizar sus conocimientos en libros y mallas curriculares que iban dirigidas a microempresarios vulnerables. “Con estos libros apoyamos a los emprendedores, con un lenguaje menos técnico y más cercano, incluso entretenido. Se los regalábamos a los microempresarios que participaban en esa fundación”, sostiene. También Carla se dedicó a la docencia, dictando un ramo de consultor pyme, donde abordaba temas de emprendimiento y fomento productivo.