La gran alianza entre la neurociencia cognitiva y de sistemas
La comprensión del sistema nervioso en todos sus niveles, desde lo molecular a lo cognitivo y social es lo que busca entregar el programa del Centro Interdisciplinario de Neurociencia.
No es un misterio que la salud mental de los chilenos está lejos de ser la más adecuada, ni que la cantidad de especialistas no da abasto para la población total que lo necesita. Sin embargo, existen iniciativas que están trabajando para cambiar esta realidad.En el Centro Interdisciplinario de Neurociencias de la Pontificia Universidad Católica de Chile se está desarrollando investigación básica y aplicada en diversas áreas de la neurociencia, que tienen relevancia en la biomedicina y en la bioingeniería. “Estamos desarrollando estudios neuro-cognitivos en trastornos neuro- psiquiátricos como el trastorno por déficit atencional y la esquizofrenia, apuntando a un diagnósticos más preciso y temprano de estas condiciones”, comenta el director de este Centro, Francisco Aboitiz. Y de paso, una buena noticia para las mamás, ya que se están evaluando las posibilidades de intervenciones terapéuticas complementarias a la medicación por fármacos. Otra potente línea de trabajo, - que se realiza en colaboración con la Facultad de Ingeniería-, se centra en el desarrollo de interfaces cerebro-computador, donde el sujeto aprende a modular su propia actividad cerebral de acuerdo a una señal de feedback que genera un computador. “Esta promisoria estrategia tiene relevancia para el tratamiento y el estudio de diversas condiciones neurológicas como las prótesis robóticas, que le permitiría comu- nicarse a los pacientes que no pueden hacerlo; generar visión en personas ciegas o incluso, el movimiento de discapacitados físicos”, destaca el doctor Aboitiz.
Una de las actividades destacadas que realizarán este año (octubre) y que busca promover la reflexión sobre distintos fenómenos de esta disciplina es La Feria de Neurociencias para Estudiantes de Secundaria.
“Se están realizando importantes estudios del efecto del stress temprano sobre el desarrollo cerebral y sus efectos en el control emocional, como factor de riesgo para enfermedades mentales”. Francisco Aboitiz, doctor en neurociencia.