Cómo estimular la autoestima de los hijos
Los padres deben fomentar la autoestima positiva de los niños desde que nacen. Un concepto que en concreto significa dar amor, entregar confianza y resaltar lo positivo de sus primeras acciones, lo que les permitirá desarrollar su personalidad para llegar a ser personas autónomas, alegres y seguras.
Desde que nacen, los niños tienen una actitud abierta y de apego hacia su madre. Y también una “mente absorbente”, como dijera la educadora y médico italiana María Montessori, para resaltar cómo ellos reciben y procesan cada estímulo de su entorno. Razones más que suficientes para que los padres estimulen al recién nacido. Mirarlo a los ojos, sonreírles y acariciarlos refuerzan el primer vínculo con el bebé; relación que se debe alimentar y reforzar cada día.
“La autoestima es el concepto y el aprecio que tiene un individuo de sí mismo, pudiendo ser negativa o positiva. Autoestima positiva es autoconfianza, en los niños es la base por la cual creerán en sí mismos y en los pasos que deben ir dando en su desarrollo. Es indispensable desarrollarla en los niños”, afirma Paulina Pérez, psicóloga de Vidaintegra. ¿Por qué es necesario estimular desde el nacimiento la autoestima en los niños? “Principalmente, porque permite desarrollar seres humanos que se sienten amados, que se aman y que se sienten capaces de desenvolverse en el mundo con seguridad”, indica la psiquiatra y académica de Medicina de U. San Sebastián, Dra. Verónica Maturana. Y Paulina Pérez añade: “El bebé necesita afecto, cariño, proximidad, comunicación, que se cubran sus necesidades básicas. Si el adulto responsable lo hace con respeto y empatía, el bebé va aprendiendo a sentir confianza y que es querido. Entonces, ya estamos forjando la base de la autoconfianza”.
Estimulación
La psicóloga de Vidaintegra propone las siguientes acciones cotidianas para fortalecer el apego y estimular la autoestima positiva en bebés.
• Mirarlo a los ojos, escucharlos y hablarles:
Aunque suene obvio muchas veces esto se salta. Los bebes miran a los ojos y requieren ese contacto para socializar y sentir el afecto, además ellos balbucean y tratan de comunicarse ante lo cual deben recibir atención.
• Reforzar conductas positivas: decirle al bebe a través de halagos, sonrisas y tono de voz afectuoso cuando haga alguna gracia o frente a sus acciones creativas.
• Fomentar la autonomía y no sobre protegerlo: esto es clave para que el bebe vaya aprendiendo el: “yo puedo”.