Más allá de la vida
Cementerios y servicios funerarios
La pérdida de un ser querido es un momento difícil para la mayoría de las personas, especialmente cuando es algo repentino. Es por ello que los cementerios buscan ofrecer un servicio cada vez más integral y personalizado, considerando las diversas creencias y necesidades de cada familia.
“El Cementerio General tiene una entrada pensada desde la Catedral de Santiago en Plaza de Armas, para continuar con la actual calle Puente, cruzar el río Mapocho, seguir por Avenida La Paz y culminar en este sitio”, afirma César Otárola, arquitecto y experto en patrimonio.
L
os cementerios son lugares donde descansan los restos de las personas; sin embargo, en Santiago existen dos muy particulares que destacan por su riqueza cultural, histórica y arquitectónica. Estos son: el Cementerio General y el Cementerio Católico.
El Cementerio General se creó por la necesidad del Estado para que no se siguieran enterrando personas en las iglesias o en otros sitios. Sin embargo, con el tiempo se trasformaron en un lugar de arte. El tema de que es un museo al aire libre es un resultado de los mausoleos que representaba al ser querido fallecido y este nuevo hogar.
César Otárola, arquitecto y vicepresidente del Comité de Patrimonio del Colegio de Arquitectos, sostiene que “en este cementerio se ven las distintas expresiones arquitectónicas de las distintas épocas, lo que demuestra la manera en que se estaba expresando el país en el marco de la modernidad que existía en ese tiempo, como la expresión del neoclásico, art nouveau, romanticismo, art decó, barroco, reminiscencias historicistas de castillos medievales o piramidales, y también hay mezclas de elementos que no pertenecen ni a uno ni a otro y se denominan estilo ecléctico hasta llegar a la actualidad con lo minimalista”.
Tradición e historia
La entrada actual del Cementerio Católico, que es posterior a su fundación pocos años después del General, es una muralla de piedra que se debe traspasar, en su centro hay una capilla de oración y adentro está separado por distintas bóvedas y edificios. “El descanso en este camposanto está dado de una manera comunitaria a pesar de estar sectorizado; está pensado en que todo convive en sí mismo. En cambio el Cementerio General es una gran necrópolis con plazas, avenidas, calles, pasajes e incluso se puede recorrer en automóvil”, aclara el experto en patrimonio.
Otra característica que tiene el Cementerio General es que ahí están los Presidentes de Chile y persoajes de la historia del país. La época de mayor riqueza del cementerio fue la del salitre donde se hicieron las grandes construcciones de familias aristocráticas adineradas”, explica el arquitecto.