Temporada de hamburguesas
Innovaciones y calidad superior
A la parrilla, la sartén o al horno, la hamburguesa conquista por su sabor, simplicidad y gran versatilidad. Acompañada de irresistibles condimentos y guarniciones, este clásico bocado ha tenido varios giros con el pasar del tiempo, derivando en innovaciones premium y recetas de categoría internacional.
C
arne picada y aglomerada, cocida de distintas formas, junto a verduras a elección, aderezos y pan. La fórmula se ha convertido en un ícono mundial de la comida rápida, sabrosa y conveniente. Un comodín para saciar el apetito en cualquier momento y lugar. Pero los orígenes históricos de la hamburguesa son menos ciertos, aunque existen referencias sobre esta preparación en distintas culturas y épocas.
La más antigua alusión data del imperio romano durante el reinado del emperador Tiberio, cuando el gastrónomo y patricio Marco Gavio Apicio describió en un recetario la isicia omentata, preparación muy similar a la hamburguesa. También hay antecedentes de esta producto cárnico en los tártaros. “Ellos consumían carnes crudas en sus invasiones, y con el tiempo esta preparación a través de la inmigración a América se comienza a preparar, pero cocida. Rápidamente se populariza, ya que tenía menor costo que un trozo de carne entero”, señala Juan Ozaki, chef ejecutivo de Culinary.
De Europa a América
Durante el Siglo XII también hay descripciones de preparaciones cárnicas parecidas a la hamburguesa, como las de la tribu nómade de los mongoles. Cuando las fuerzas mogolas invadieron Rusia dejaron registro del consumo de carne de caballo picada, que luego se conoció como filete tártaro. El vínculo de este producto con la ciudad alemana de Hamburgo se remontaría al siglo XVII, cuando al puerto germano llegaban los barcos rusos con las recetas del filete táraro. En el siglo XIX, el puerto de Hamburgo se consolidaba como uno de los principales de Europa y puente desde el Viejo Continente hacia el nuevo mundo de América. Así, a Estados Unidos llegaban inmigrantes alemanes y de Europa del Norte con sus costumbres culinarias, por lo que la carta de restaurantes de Nueva York y otras ciudades destacaban entre su oferta los steak cooked in the hamburg style. El producto creció en popularidad y a la llegada del siglo XX ya se había ganado un lugar en la mesa de los norteamericanos. “La hamburguesa se hace muy popular entre los estadounidenses en el período de postguerra de la Primera Guerra Mundial, y una muestra de ello es su aparición con personajes de cómic”, recuerda el chef de Culinary.
La favorita de Pilón
En esos años, las tiras cómicas y luego los dibujos animados hacen un guiño a la hamburguesa a través de Popeye el Marino, donde está el personaje Pilón (Wimpy) con su siempre fiel hamburguesa. “Es un amante de las hamburguesas, un personaje que aparece como educado y glotón. Wimpy populariza una frase ‘I’ll gladly pay you tomorrow for a hamburger today’ (Con mucho gusto le pagaré mañana la hamburguesa que me sirva hoy).
Este personaje de la década de 1930 presenta la hamburguesa a la juventud de la época como un alimento sano. Se creó una cadena de restaurantes de comida rápida denominada Wimpy’s en su honor que vendía hamburguesas a 10 céntimos”, dice Ozaki.
La historia más reciente ya es conocida. Cadenas multinacionales, restaurantes especializados y productos para distintos gustos y presupuestos han hecho de la hamburgue- sa un producto alimenticio global. “La hamburguesa tal como la conocemos nace de las necesidades culinarias de una sociedad que, por su reciente industrialización, lleva un ritmo de vida más acelerado, es decir, es un plato rápido y que me va tomar poco tiempo comprarlo y comerlo”, afirma el docente de Culinary.
“La hamburguesa se hace muy popular entre los estadounidenses en el período de postguerra de la Primera Guerra Mundial, y una muestra de ello es su aparición con personajes de cómic”. Juan Ozaki, chef ejecutivo de Culinary.