El mercado inmobiliario en la costa del norte
Pese a los últimos dos años difíciles debido a la ralentización económica y a la caída del cobre, se espera que el desarrollo inmobiliario de Iquique, Antofagasta y La Serena mejore con la nueva situación del metal rojo.
La demanda de La Serena está un poco más vinculada a la segunda vivienda que Iquique y Antofagasta.
El desarrollo inmobiliario de estas tres ciudades costeras: Iquique, Antofagasta y La Serena es bastante parecido y se relaciona mucho con la contingencia dada por la ralentización económica del país luego del boom inmobiliario de 2015, que elevó el desarrollo de la zona para después tener el efecto contrario, debido a la caída en el precio del cobre. “Entonces, estas tres ciudades se quedaron con stock y si bien la situación empieza a mejorar, ya que se está viendo mayor interés y se reactivarán los desarrollos inmobiliarios, una vez que el stock que aún queda de los últimos dos años se comercialice”, comenta Claudio Retamal, analista del área de Estudios de portalinmobiliario.com.
De hecho, las estadísticas de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Antofagasta apuntan a una menor construcción de viviendas al 2019, además de mostrar un significativo descenso en la inversión inmobiliaria local entre enero y junio de 2017. De esta forma, la inversión acumulada el primer y segundo trimestre 2017 respecto al 2016 presenta una disminución de -18,5% (9.923 millones de pesos a 8.087 millones de pesos). Para el presidente regional del gremio Andrew Trench, esta “tendencia a la baja menos negativa, también ha evidenciado un leve crecimiento pero siempre por debajo de lo esperado, lo que proyecta una reducción de 60% en unidades habitacionales para un año normal”.
De acuerdo con la CChC La Serena, en esta ciudad al año 2016 hay 44 proyectos de casas, las que implican más de 3.500 unidades, 34 de ellos en el sector oriente y 10 en el poniente. En departamentos, las iniciativas son 43, equivalentes a 4.800 unidades ( 27 en sector oriente y 16 en el poniente).
Sobre todo Antofagasta y La Serena tienen temas regulatorios pendientes, por lo que se espera una definición para poder optar a otro tipo de edificación.
Claudio Retamal avizora una buena expectativa para el próximo año, gracias al alza en el precio del cobre: “eso ya adelanta una buena expectativa y el mercado inmobiliario, por lo que vemos en nuestras estadísticas de demanda y lo que nos han comentado algunos desarrolladores inmobiliarios de la zona, se está moviendo de manera más acelerada que hace algunos meses”.