Condenado por narcotráfico es rescatado desde hospital de Valparaíso
Dos hombres y una mujer redujeron a los guardias y liberaron a Juan Mora, condenado a 10 años de cárcel por vender drogas. Los prófugos huyeron del Hospital Eduardo Pereira en una camioneta que fue encontrada en Villa Alemana.
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R Un operativo de rastreo, que incluye a las prefecturas Metropolitana, de San Antonio y Viña del Mar, realiza Carabineros de Valparaíso para dar con los autores de la liberación de un reo que cumplía condena en el centro penitenciario porteño.
Fue a las 7.50 horas de ayer, cuando dos hombres y una mujer entraron raudos y armados hasta el tercer piso del Hospital Eduardo Pereira, ubicado en Santos Ossa en Valparaíso. Su objetivo: rescatar y darse a la fuga junto al reo Juan Andrés Vera Rivera (28), quien desde el 29 de marzo estaba en reposo, tras una riña en la cárcel que concluyó con una herida penetrante en su tórax.
“El ya estaba en condiciones para ser devuelto al penal”, comenta el director del centro, José Mi g u e l Verscheure, quien define como “una cosa muy rápi- da” lo que pasó en su hospital, donde sigilosamente fueron reducidos dos gendar- mes con golpes en la cabeza, para más tarde sustraer sus armas y la llave que dio la libertad al narcotraficante condenado a 10 años por tráfi-co de cocaína y robo con intimidación. Verscheure señaló que existió personal que vio lo sucedido, pero “nadie se expuso a consecuencias, ya que t a mpoc o n a d i e fue amenazado, si fue una cosa de cinco minutos, no más”.
Poco pudieron hacer también los guardias del centro, ya que al salir los cuatro sujetos robaron una camioneta, estacionada a la entrada, para darse a la fuga.
Ante esto, el jefe médico se defendió afirmando que “no es nuestra responsabilidad el mantener detenido a un sujeto que es trasladado de un recinto penal, para eso viene personal de Gendarmería destacado”, se defiende el jefe médico.
Opinión contraria tuvo el
RR director regional de Gendarmería, coronel Gustavo Sandoval, quien primero aseguró que lo acontecido no debe catalogarse como fuga, ya que “aquí no hubo descuido, sino que fue un rescate, nosotros cumplimos con todos los protocolos”.
En ese sentido, la autoridad sostuvo que Gendarmería no tiene atribución para revisar a las visitas, por tanto, “no sé qué protocolo tiene el director de hospital con sus guardias, que dejan ingresar civiles con armas”.
Fue así como los cinco antisociales empoderados de la situación con armas policiales logran, además, salir de la ciudad. Así fue confirmado h o r a s más tarde, cuando se encontró la camioneta Chevrolet Luv en la calle Chile, esquina Los Alamos, en Villa Alemana, la que fue periciada por el Laboratorio Criminalístico.
Sobre la vinculación de los autores del rescate, el coronel Sandoval cree que se trata de un grupo organizado que ya había realizado visitas previas al reo.
“No cabe duda que fue todo concertado, como no tengo duda tampoco que la herida del sujeto pudo ser autoinferida para ser llevado hacia el hospital”.
Desde el centro, en tanto, afirman que una mujer, con domicilio en Concón, había realizado visitas a Vera en la sala de cuidados.
En esa línea, el jefe de los servicios de la Prefectura de Va l p a r a í s o , c o mandante Fernando López, dijo que la mujer no tiene vínculo familiar con el reo, “por lo que se investiga si existe relación sentimental con él”. En forma acelerada y, en algunos casos, debiendo recorrer largas filas, fueron miles los conductores que esperaron hasta el último d í a pa r a c umplir c o n e l pago del permiso de circulación. Pese a que varios de los 345 municipios del país estiraron ayer hasta la medianoche el plazo de cancelación, unos 70 mil vehículos particulares no cumplieron este trámite, representando, aproximadamente, el dos por ciento del parque automotor nacional.
La mayoría de los rezagados se concentra en Santiago, ciudad que reúne el 80% de los vehículos del país, según explica Rodrigo Delgado, alcalde de Estación Central y vicepresidente de l a Comisión de Transporte de la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM). Por otro lado, los taxis y buses tienen plazo hasta el 31 de mayo.
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