Ampuero lanza novela sobre Allende en Hispanoamérica
Se desanuda la corbata, echa un par de hielos en un vaso y vierte una medida de Chivas Regal. Son las últimas noches de la Unidad Popular y un siempre elegante Salvador Allende se sienta en la cocina de su casa de Tomás Moro, a escuchar tangos con su ayudante Rufino. “No es fácil forjar la nueva patria” , dice el presidente, mientras hablan de Julio Sosa, Roberto Goyeneche, Enrique Santos Discépolo.
Con predilección por la co- mida chilena, el whisky escocés, reacio a hablar de sus mujeres, político a tiempo completo y convencido de formar parte de la misma estirpe que los padres de la patria. Así es el Allende que perfila Roberto Ampuero en su nuevo libro, El último tango de Salvador Allende, una novela que regresa al Chile de los 70 para descubrir que la crisis política tuvo efectos en todos los bandos: incluso a los golpistas la historia les cobrará la cuenta.
En librerías desde la semana pasada, El último tango de Salvador Allende es el título de la nueva alianza de Ampuero con la editorial Random House Mondadori. Seguirá así: en septiembre, el sello empezará a lanzar en edición de bolsillo sus novelas protagonizadas por el detective Cayetano Brulé y en 2013 se publicará una nueva aventura del personaje. Con El último tango... se empezó bien: la novela ya entró al ranking de los más vendidos.
Ampuero, actual embajador en México, lanzará El último tango... el jueves 19 de abril, en el Centro Gabriela Mistral (GAM), para luego seguir una ruta inter- Sudamericana, 375 páginas, $ 14.000. El 19 de abril será presentada en el GAM, por Héctor Soto y Eugenio Tironi. nacional: a fin de mes, la presentará en la Feria del Libro de Bogotá, en mayo en México y en junio en Argentina. En septiembre, la novela llegará a España.
Historia y ficción
Se trata de una nueva exploración de la historia a través de la ficción de parte de Ampuero: en El caso Neruda jugó con la posibilidad de que el poeta tuviera un hijo perdido y ahora entra en la intimidad de los últimos días de Allende a través de un supuesto diario de vida de un colaborador del Presidente en la casa de Tomás Moro. Ampuero habla de los efectos del peso de la historia en el líder socialista.
“La historia no agota el análisis del pasado. La literatura puede brindar una dimensión que va más allá y puede ser más profunda al palpar la esencia del desarrollo histórico”, dice. Y sigue: “¿Qué pensó Allende en los últimos momentos de soledad en La Moneda, cuando lo bombardeaban? ¿Qué sienten en su fuero íntimo los que en ese momento pensaron que había que desestabilizarlo y derrocarlo? Esa dimensión perdida sólo puede explorarla con autoridad la ficción”.
La novela sigue los pasos de David Kurtz, un ex agente de la CIA que estuvo en Chile en los 70 colaborando en la desestabilización de la UP. En los 90 regresa al país tras el pedido que le hace su hija en el lecho de muerte: quiere que le lleve parte de sus cenizas a un hombre chileno. Además, le entrega el diario de vida del ayudante de Allende. Kurtz se enterará que su hija estuvo ligada precisamente al grupo que él ayudó a eliminar.