Vía Crucis en Reñaca convoca a 5 mil personas
El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, reconoció ayer que, tras sostener una reunión con integrantes del clero capitalino, se retomó la idea de disolver la Unión Sacerdotal del Sagrado Corazón de Jesús, creada en 1928, la cual era liderada por el ex párroco de El Bosque Fernando Karadima, condenado por el Vaticano por abusos sexuales contra menores.
Durante la conmemoración del Vía Crucis realiza- do en la comuna de Colina, Ezzati dijo que la disolución del grupo religioso “es una posibilidad”.
Además, aseguró haber entregado al Vaticano los resultados del informe de la visita canónica a la Unión Sacerdotal. La entidad llegó a reunir a 40 sacerdotes y cuatro obispos formados en El Bosque. Sin embargo, 10 sacerdotes renunciaron tras estimar que las acusaciones de actos impropios contra Karadima eran “verosímiles”.
Según explicó Ezzati,
si bien “el caso del padre Fernando Karadima está terminado, lo que he hecho es que he enviado a la Santa Sede el resultado de la visita canónica”.
La intervención estuvo a cargo del obispo uruguayo Carlos Collazzi, terminó a fines de enero y consistía en analizar el funcionamiento de la agrupación. Esta medida se adoptó por orden de la Santa Sede, tras un fallo de primera instancia en que se declaraba culpable al ex párroco Fernando Karadima de come- ter abusos.
Ahora, la Congregación para la Doctrina de la Fe, con sede en Roma, deberá pronunciarse dentro de los próximos meses sobre el destino de la agrupación que lideraba Karadima, quien fue sancionado a llevar una vida de retiro y oración. El Vaticano también dictaminó que el religioso no puede tener con- tactos con miembros de la Unión Sacerdotal ni con feligreses de El Bosque.
En la actividad religiosa de Colina, Ezzati llamó a fomentar la tolerancia y el respeto entre las personas. Asimismo, pidió por quienes sufren en las “cárceles, en los hospitales y quienes sufren el menoscabo de su dignidad humana”. Un masivo y solemne Vía Crucis se desarrolló ayer en los distintos sectores de la playa de Reñaca, en la V Región, al que concurrieron unas cinco mil personas, según los datos entregados por Carabineros.
La actividad, presidida por el párroco de Reñaca Enrique Opazo y que cumple 15 años, comenzó a las 20.00, en el primer sector del balneario, y avanzó por las distintas estaciones de la procesión por un sendero creado con antorchas apostadas en la arena hasta el sector 5, lugar donde una gran cruz envuelta en mantos blancos esperaba a los emocionados fieles. El párroco destacó la convocatoria y el respeto de la gente, que, dijo, no sólo aprovechó el fin de semana largo para descansar, sino que también para la reflexión.