Basay reconoce vínculo con la barra, pero repudia últimos hechos
Tardó, pero llegó. Cuatro días después de las amenazas telefónicas recibidas por Carlos Muñoz, en la antesala del partido entre Colo Colo y Unión Española, sus compañeros y el técnico Ivo Basay enfrentaron a los medios para manifestar su rechazo ante el “apriete” sufrido por el ex delantero de Santiago Wanderers.
“No hablamos antes porque no queríamos que la información se fuera para otro lado, considerando el tema de BYN y la reunión de ayer en la intendencia”, se justificó Basay, quien, precisamente en el sector donde se ubica la Garra Blanca en el estadio Monumental, enfrentó el tema flanqueado por Esteban Paredes, Luis Mena, el plantel y los funcionarios del recinto.
De entrada, el “Hueso” repudió el accionar de los barristas contra Muñoz, dejando en claro que, más allá del conflicto, su relación con los hinchas siempre ha sido fluida, tanto en sus tiempos de jugador como en los con el buzo de técnico.
“Desde que llegué en 1995 he tenido una buena relación con la barra y hasta el día de hoy la seguíamos teniendo. Seguiremos apoyando cualquier situación relacionada con actos benéficos, pero siempre dentro de los márgenes normales. No vamos a tolerar actos delictuales y eso lo vamos a cortar de una vez, ya que los últimos hechos tienen nuestro absoluto repudio”, expresó el entrenador.
Sobre su nexo con Francisco Muñoz (“Pancho Malo”, líder de la Garra Blanca), quien señaló que el técnico y el capitán Esteban Paredes eran el puente de comunicación entre los barristas y el plantel, Basay afirmó que “no necesitamos ese vínculo, ya que nuestra disposición sólo será para obras sociales”.
Paredes, al igual que Mena, solidarizó con la situación vivida por Muñoz. “Tanto él como su familia tienen todo nuestro apoyo. Hay que parar estos hechos. Por ahora, la denuncia está en manos de Colo Colo”, destacó el delantero.
Por último, Mena agregó que “somos agradecidos del hincha, pero actos como éste enlodan lo bonito de esta profesión”.