Alemania quiere dar permiso laboral a abuelos para cuidar a nietos
El permiso sería análogo al que se les concede a los trabajadores por paternidad. El proyecto oficialista llega en medio de la discusión de un subsidio para algunos padres.
R Alemania quiere introducir un permiso laboral de “abuelidad”. Según los planes de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel, el gobierno introducirá para los abuelos un “permiso análogo a los tres años” que se concede a los trabajadores por paternidad. Así, los mayores podrán compaginar mejor el trabajo con el cuidado de sus nietos. En Alemania, el permiso de pa-
R ternidad puede solicitarse hasta que el hijo cumple tres años, siempre que el progenitor conviva con el niño y se ocupe personalmente de él. De momento, no se conocen muchos detalles de este f u t u r o p e r mi s o p a r a los abuelos. En cualquier caso, la CDU aboga por “la implicación de los abuelos en la educación de los nietos”. La cuestión principal es cómo se garantiza el regreso de los abuelos a sus puestos de trabajo una vez concluido el período de baja o de re-
ducción de jornada.
Discusión por subsidio
Esta propuesta llega en medio de una polémica entre los partidos de la coalición de centroderecha que gobierna Alemania. Liberales (FDP) y democratacristianos (CDU/CSU) discuten desde hace meses sobre la introducción de un subsidio para los padres que se ocupen exclusivamente de sus hijos en casa y renuncien con ello a los jardines infantiles públicos o concertados. La CDU quiere que los progenitores que se ocupan de los niños perciban un subsidio de 100 euros mensuales desde que los pequeños cumplen un año. A partir de 2014, la CDU se plantea aumentar el subsidio a 150 euros mensuales para los padres que cuiden de sus hijos en casa sin llevarlos a la guardería.
El secretario general de la CDU, Hermann Gröhe, explicó en la edición dominical del diario Die Welt que “la discusión sigue pendiente”. Tanto es así, que 23 diputados democratacristia- nos han anunciado que votarán en contra del subsidio defendido por la canciller Angela Merkel. Consideran, entre otras cosas, que dicho subsidio disuadiría a muchas familias inmigrantes de enviar a sus hijos al jardín infantil, dificultando con ello su aprendizaje del alemán. La ministra de Familia, Kristina Schröder, propone, por eso, condicionar los pagos: sólo cobraría el que lleve regularmente a sus hijos a las revisiones pediátricas. Considera que faltar a estas revisiones es un indicio de problemas familiares.
“Debemos fijarnos en este pequeño grupo” de familias para animarlas a que lleven a sus hijos a las guarderías, dice.
La oposición a estas subvenciones es notable en el resto de los partidos, que defienden que el dinero destinado a ellas se dirija a jardines infantiles públicos. El liberal FDP, socio de la CDU en el gobierno, se ha opuesto repetidamente a la medida. Las negociaciones tendrán que continuar.