Penalistas discrepan sobre necesidad de eliminar obligación de denunciar
La idea de que prime la confidencialidad entre el médico y un paciente que se somete a un aborto, por sobre la denuncia del hecho, generó posturas contrarias entre abogados penalistas.
De acuerdo al proyecto de ley presentado el sábado por el gobierno, “se busca privilegiar el deber de confidencialidad por sobre el deber de denuncia ante una interrupción del embarazo realizada por la mujer o por un tercero con su consentimiento”.
Consultada por este punto, la académica de derecho penal de la Universidad Católica, Magdalena Ossandón dijo que “la con- fidencialidad que se quiere aplicar, sería en todo ámbito (no solo en las tres causales), desde una mujer que ha cometido su aborto o que ha consentido en q ue o t r a p e r s o na se lo haga”.
Al respecto, la penalista sostuvo que l e “parece complejo” privilegiar la confidencialidad por so- bre la denuncia”, porque en cierta medida no se percibe la gravedad del delito que se ha cometido”.
Para Ossandón, “al eliminarse la obligación (de denunciar los delitos) se pierde la posibilidad de perseguir a los proveedores de misotrol, a las clínica abortivas y entonces hay que ponderar muy bien el interés de la mujer, con el interés en que se comentan más abortos”.
Según Arturo Alessandri, vicepresidente del Colegio de Abogados, “si esto va a depender exclusivamente de la confidencialidad entre un paciente y un doctor, se abre una posibilidad enorme de practicar abortos ilegales”.