Caso Caval
Señor director: El “nueragate” está lleno de implicancias ingratas. Quienes hemos tenido responsabilidades públicas no debemos practicar el viejo adagio por conveniencias personales de que “en boca cerrada no entran moscas”. La increíble transacción crediticia y comercial en la cual participa el señor Dávalos se puede considerar como un tsunami político.
Dejo constancia de que he pertenecido a la Concertación y ahora a la Nueva Mayoría. Mi formación y experiencia me han aconsejado que por muchas lealtades no se debe comulgar con ruedas de carreta. Ser recibido por el dueño de un banco crediticio como empresario de una sociedad con seis millones de pesos, y salir con un crédito de seis mil millones, es para el Libro de Guiness.
Seamos claros: el señor Dávalos le rayó el paño a la Presidenta de la República, que es su madre. Personalmente, veía a nuestra Presidenta en la carrera por ser la secretaria general de Naciones Unidas en reemplazo de Ban Kimoon, pero tras esto no me parece tan claro.
Si alguien del gobierno lee esta carta sugiero que no olvide el aforismo “los cuidados del sacristán terminaron matando al señor cura”. Felicitar y darse por conformados con que Dávalos renunciara al cargo, donde se manejan miles de millones de pesos, me parece una actitud fría y cínica. Su declaración resultó sin contenido e incoherente, faltándole el respeto a un país ávido de información.
La elite política de uno y otro lado participan cuidando los votos. Pero se equivocan. Esta estrategia errada sólo aumenta el desprestigio de la política, que es una noble actividad.
No nos equivoquemos. Se podrá construir un discurso absolutorio, pero Chile espera una declaración de Luksic y lamentablemente de nuestra Presidenta, que está en el cariño de millones de chilenos que sufren por su silencio.
No voy a repetir los argumentos que anticiparon este desastre, pero sí consignar que esta norma no fue fruto del arrebato ni la rapidez del trámite legislativo. Por eso es indispensable no sólo modificar la Ley de Pesca, sino también investigar qué relación existió entre política y dinero, ya que podría ser un nuevo caso Penta.