NEGOCIOS EN PROBLEMAS
Banco de Venezuela
Esta entidad formaba parte del grupo español Santander y fue expropiada en 2009 por el entonces Presidente Hugo Chávez.
Cemex
Venezuela controló la industra cementera tras la nacionalización de las tres principales productoras: Cemex, Lafarge y Holcim.
Exxon Movil
La petrolera estadounidense recibió en 2014 cerca de US$ 1.600 millones en compensación por la nacionalización de sus activos en el país sudamericano. destacaron que el gobierno estaba “irritado” al ver cómo en los medios españoles se describió la relación de Podemos y el gobierno venezolano, como el “talón de aquiles” de ese partido español.
Tanto el Partido Popular de Mariano Rajoy como el Partido Socialista han acusado a Podemos, de haber sido financiados por Venezuela, situación que el líder de esa colectividad, Pablo Iglesias, ha rechazado en varias ocasiones.
Además, los funcionarios del gobierno de Maduro trasmitieron a los empresarios españoles una queja por el trato que el jefe de gobierno español y su equipo de Relaciones Exteriores, ha tenido con Maduro, quien “ha llegado a ser ninguneado” por España en distintas citas internacionales.
La presión ejercida desde Caracas busca que los empresarios utilicen sus mecanismos en los medios de comunicación para mejorar la percepción que tienen los españoles sobre Venezuela.
Otra de las preocupaciones del gobierno venezolano te- nía que ver con las informaciones relacionadas con Diosdado Cabello, el presidente de la Asamblea Nacional y considerado el número dos del chavismo, que fueron publicadas en Abc y que hablaban de una supuesta conexión entre el político y el narcotráfico.
El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, calificó la situación de “absolutamente intolerable”. En una entrevista en la televisión regional Telemadrid, Soria aseguró que no se pueden exigir “intereses que nada tienen que ver con los intereses legítimos de las empresas que operan en Venezuela”. El ministro reconoció también que el gobierno español está “preocupado” por las exigencias realizadas por el gobierno de Maduro.
También el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, se pronunció sobre el asunto y aseguró que “en un Estado democrático y de derecho, las libertades de opinión y prensa son principios absolutamente irrenunciables”.