Otra vergüenza
En la víspera del encuentro, los dos buses de Boca Juniors fueron emboscados por desconocidos, a unas ocho cuadras del estadio Santa Laura.
Uno de los vehículos terminó con un vidrio roto. Si bien en un principio se especuló con una posible agresión de los propios barristas xeneizes, esto no pudo ser comprobado.
Según manifestó el conductor de una de las máquinas, Claudio Martínez, “eran unas tres o cuatro personas las que lanzaron piedras. No andaban con camisetas ni con nada que los identificara como seguidores de algún equipo. Obviamente, la situación asustó a los jugadores de Boca, que se quedaron comentado entre ellos”.
No hubo heridos en el incidente, pese a que se espe- culó con que el entrenador de arqueros, Fernando Gayoso, había sido lesionado.
El incidente no fue el único que se produjo en el recinto de Plaza Chacabuco: sobre el final del partido, un hincha irrumpió en la cancha, para encarar al árbitro colombiano Wilmar Rol d á n. L a s i t u a c i ó n no pasó a mayores, y el agitado simpatizante fue retirado del lugar, siendo dete- nido por Carabineros.
De todos modos, el técnico de Palestino, Pablo Guede, lamentó la situación: “No tengo idea, pero si hay algún castigo por eso. Sería malo para el club, es algo que no está bien, y que no debería pasar”.
La Conmebol ya reunió todos los antecedentes, y en los próximos días decidirá si sancionará al cuadro árabe.