Colapso en revisiones técnicas
COMO SE ha vuelto recurrente cada año en este período, a pocas semanas de que expire el plazo para renovar el permiso de circulación las plantas de revisión técnica se encuentran sobrepasadas por la cantidad de personas que llevan sus vehículos a realizar este trámite, situación que ha provocado en algunos puntos que los conductores deban esperar hasta seis horas para cumplir con el procedimiento. El resto del año, en todo caso, la demanda también es alta.
Si bien se han adoptado medidas para enfrentar estos inconvenientes, se trata de acciones paliativas que son insuficientes para resolver el problema de fondo. Es evidente que el fuerte crecimiento experimentado por el parque automotor en los últimos años ha aumentado de manera importante la demanda por este servicio -actualmente se realizan sobre cinco millones de revisiones anuales-, pero aquello no ha ido acompañado de un incremento en igual proporción del número de plantas de revisión técnica a lo largo del país. Existen también dificultades con el emplazamiento de estos recintos, ya que mientras hay comunas que concentran un mayor número de ellos, varias no tienen ninguna planta, lo que provoca focos de congestión en determinadas zonas y deja sin oferta de servicio a otras.
Así como el gobierno está impulsando reformas para promover la competencia y el ingreso de nuevos actores en ámbitos tradicionalmente restringidos, como las notarías, también debiese evaluar la posibilidad de realizar cambios al sistema de plantas de revisión técnica, que por años ha estado en manos de pocos operadores y cuyo negocio mueve al año cerca de US$ 150 millones. En la medida que existan parámetros claros de funcionamiento y una adecuada fiscalización para estos nuevos oferentes, se podría concesionar el sistema de revisión técnica y abrirlo, incluso, a talleres y servicios técnicos existentes.