Cumpleaños feliz y guerra feroz
FUE UNA guerra feroz. La más violenta pelea de reinas. Katherine Salosny y Jhendelyn Núñez, Mega y Canal 13, se enfrentaron a muerte y llovieron las fiestas, asados, regalos y promesas de infartantes bikinis para el piscinazo final. Kathy prepara uno hechos sólo de flores adheridas a su cuerpo y Jhen saldrá con unos pocos cristales pegados por aquí y por allá y nada más.
Pero a Carolina de Moras no le llega ni una pizca de este odio electoral y pasó un cumpleaños feliz. La soberana de la Quinta Vergara cumplió los 34 rodeada de amor. Llegaron su mamá; su pololo, el ingeniero galán Mauricio Sanz, y su hija preciosa que la hizo llorar.
La Mila le hizo a su mamá modelo un joyero con forma de corazón, en amarillo verde y celeste. “Mamá, para que guardes tus collares de Viña del Mar”, le dijo cuando se lo entregó. La cumpleañera no daba más de chocha, y más tarde, ya de madrugada, se fue a su suite del Hotel Enjoy con Mauricio.
Rafa Araneda le mandó un ramo de flores a nombre de él y Marcela Vacarezza y, como los animadores no tienen tiempo para nada, aprovecharon la tradicional reunión de pauta para cantar el Sacaron una Selva Negra para varias personas y pusieron la canción puro para molestarla. Después Ara
Tres deseos y Carola apagó neda le dedicó las velitas.
Fue una reunión de camaradería y buena onda. Nada que ver con Arjona, que se las dio de Luis Miguel y arribó con una hora de atraso a la Quinta Vergara. Estaban todos con los nervios de punta esperando al divo guatemalteco, que además prohibió que hubiese gente en los pasillos del backstage cuando él caminara por ellos. Hasta al director de Chilevisión, Jaime de Aguirre, lo agarraron de un brazo y lo tiraron para un lado, para que el poeta de
no se molestara. Desubicado.