Melody: una historia de música y lucha contra la pobreza
Marialy Rivas ( Joven y alocada) estrena un corto documental. El filme es parte de un programa del Sundance Institute.
terior que mezcla vidrio y madera. Según los autores, lo que se buscó fue responder a la expectativa del cliente de tener un edificio de aspecto contemporáneo, sin caer en el cliché de Santiago: los edificios con fachada de vidrio. “La idea fue maximizar los encuentros casuales entre personas porque esas coincidencias son fundamentales en la innovación. Cada ventana es una plaza elevada y el atrio central es una vitrina para ver lo que hacen los demás, así como los ascensores transparentes, algo que nunca ocurre en los edificios de oficina convencionales. También cambia el paradigma del edificio de vidrio que es una aberración en el clima de Santiago”, explica Aravena. El edificio además consume la mitad de la energía que utiliza cualquier torre de vidrios en la capital.
Entre los competidores más fuertes del Design of The Year figuran, por supuesto, los que ya tienen una carrera consolidada en la escena mundial.
Están los suizos Herzog & Meuron (Estadio Nacional de Pekín) con el gimnasio Arena do Morro, ubicado en una favela en Natal, Brasil, y el mediático centro cultural de la Fundación Louis Vuitton, construido por la oficina de Frank Gehry (Museo Guggenheim, Bilbao) en París, que evoca la tradición de los edificios de vidrio de los jardines del siglo XIX. El centro consta de bloques blancos, bautizados como “los icebergs”, cubiertos por placas de vidrio puestas una sobre otra que le dan un aspecto serpenteante. Mientras, el francés Jean Nouvel (Torre Agbar, Barcelona) presenta el One Central Park, una torre de edificios residencial, cruzado a su alto por parques y jardines comunitarios.
Otros proyectos interesantes por su rescate patrimo-
OO
PP nial son el Museo Largo West Bund del Atelier Deshaus, en Shanghai, China, ubicado en un antiguo muelle donde se transportaba carbón y donde se ha dejado intacto un puente de los años 50; la Filarmónica de Szczecin, en Polonia, del estudio Barozzi Veiga, levantada donde estaba su predecesora, destruida durante la II Guerra Mundial, y el Markthal de la oficina MVRVD, en el centro histórico de Rotterdam, Holanda, que ya se ha convertido en un ícono por reunir en un solo lugar un mercado de abarrotes, restaurantes, viviendas y estacionamientos, todo bajo un gran arco espejado. Empezó de niña con la flauta traversa y a los 18 la reemplazó por el saxo. El cambio de instrumento la llevó del repertorio clásico al jazz. Y aunque Marialy Rivas pronto perdió el entusiasmo, esta sensibilidad fue determinante cuando recibió la invitación del Sundance Institute para hacer un corto sobr e la superación de la pobreza: buscó una historia ligada a la música.
El resultado es Melody, un filme de ocho minutos en que la directora de Joven y alocada arma una historia narrada por dos protagonistas: la profesora de música Melody Jerez, directora de la Orquesta Infantil de Chonchi, en Chiloé, y su alumna Georgina Avila, de 13 años.
Melody Jerez, de 28 años, fue parte de la primera generación de la Orquesta Infantil de Curanilahue, fundada en 1996. El conjunto es emblemático porque su historia motivó a Luisa Durán a crear la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles (FOJI), y Ricardo Lagos los invitó a tocar en la ceremonia en que asumió la Presidencia. “Estuvimos en el cambio de mando el 2000 y después él y la señora Luisa fueron al último concierto que dimos, el 2004, en la Plaza de la Constitución”, recuerda Jerez.
Formada luego en la Universidad de Talca, la profesora se trasladó a Chonchi, donde fundó la Orquesta Infantil y descubrió a Georgina Avila. Pero la familia de la niña emigró al norte en busca de mejores posibilidades. Ante ello, Melody Jerez recibe a Georgina en su casa para que pueda continuar su educación musical.
El clímax del relato es el concierto que ofrece la orquesta en el Teatro Municipal de Santiago. “El día más bacán de mi vida”, describe la niña violista.
Llámalo suerte
En 1998, Diego Meza Soto estrenó Divertimento, un documental de 37 minutos sobre la Orquesta de Curanilahue y su relación con la actividad carbonífera de la ciudad. Grabó a varios de los integrantes, entre ellos a una niña de 10 años llamada Melody. El nombre quedó grabado en la cabeza de Andrea Chignoli, colaboradora de Meza y montajista de Joven y alocada.
Cuando Chignoli estaba trabajando junto a Marialy Rivas en este corto, le comentó aquella coincidencia. Rivas, que dice haber tenido varias de estas casualidades en su vida, siguió la pista y contactó al realizador, quien no tuvo problemas para en- vi arl e el material. “Muy amorosamente nos mandó su documental y efectivamente salía Melody cuando chica. Yo ya había filmado todo y fue una casualidad absoluta”, recuerda Rivas. “Yo pensé que iba a tener que recrear todo con fotos y de repente aparece este material: fue increíble”, dice.
Melody, que se puede ver en el sitio web del New York Times, fue realizado en el contexto del Shorts Film Challenge de Sundance Institute. En la instancia, apoyada por la Bill & Melinda Gates Foundation, la organización convocó a cineastas de diferentes países para que enviaran historias de personas ayudando a otras a superar la pobreza y el hambre extrema.
El proyecto consta de nueve cortos en total, que se exhiben en diversas plataformas. De ellos, cinco se eligieron entre más de 1. 300 historias postulantes, incluidas la de Rivas y de los mexicanos Gael García Bernal ( The visible hand) y Diego Luna ( Nana).
Actualmente, la directora trabaja en su segundo largometraje, sobre una niña que descubre su sexualidad y cómo su entorno -una secta que representa la opresión del machismo y la religión sobre las mujeres- censura su búsqueda.