Cambio de mando
Fórmula Uno, En Hungaroring, Lewis Hamilton gana su tercer Gran Premio consecutivo tras soportar el permanente asedio de de Nico Rosberg y ahora es el nuevo líder del mundial de pilotos. Red Bull tiene a tiro a Ferrari en los constructores.
HHungría, la carrera que indica la mitad de la temporada 2016, trajo una oleada de cambios en la Fórmula Uno, siendo la principal que hay desde ahora un nuevo líder en el mundial de pilotos. A Lewis Hamilton le costó 10 carreras relevar a su coequipo Nico Rosberg de la punta del campeonato. Desde el incidente de España, donde ambos chocaron, el británico se ha enfocado completamente en buscar el tri y los resultados lo demuestran. Salvo el GP de Europa, donde remató quinto por una horrible qualy, todo lo que se ha corrido lo ha ganado.
Hungría no fue la excepción. Es sabido que Hungaroring, dado su estrecha pista y sus sinuosas curvas, se vuelve complicado para adelantar, por lo que la clave es una buena clasificación el sábado. Sin embargo, el incidente de las banderas amarillas y la pole de Rosberg pusieron alerta a Hamilton, que llegaba a Europa Central con un punto de desventaja.
Por eso, el asalto a la punta fue rápido. Aprovechando una floja par- tida del alemán (cada vez más presionado), Hamilton agarró el primer lugar y no lo soltó, excepto en el ingreso a pits. Todo lo demás fue puro Hammer Time.
Claro que Rosberg no lo dejó tranquilo. Hungría fue una carrera particularmente limpia entre ambos, aunque el alemán se empeñó en recuperar el liderato perdido en el primer giro. Ayudó también que la decisión de cambio de gomas en el W07 de Hamilton no fue la adecuada, ya que el británico acusó problemas para tomar ritmo cuando usaba neumáticos blandos.
Por eso, la distancia entre los dos Mercedes osciló entre el segundo, décimas más, décimas menos. Pese a lo ajustado de lo que fue la carrera, jamás Rosberg presentó una real amenaza al liderato de Hamilton. Quizá la única parte donde el alemán estuvo más cerca fue cuando el británico se enfrascó en una pelea por sobrepasar el Haas de Esteban Gutiérrez, el que terminó con un obsceno gesto por parte del bicampeón (ver página 17). Ahí fueron casi cuatro décimas los que separaron a los dos pilotos.
“No sé cuál es el secreto aquí. Naturalmente, tener un gran equipo es clave, pero es una pista en la que un piloto agresivo rinde bien. Espero que pueda seguir en esta forma el resto de la temporada”, declaró Hamilton, que llega así a su quinto festejo en Hungría, el máximo vencedor en el circuito, y la 48º de su carrera.
Lewis Hamilton no fue la única modificación que la Fórmula Uno se llevó este fin de semana. Hungría marcó también el ascenso de Red Bull, que se convierte en el nuevo rival directo de Mercedes.
Tras varias fechas acechando a Ferrari, el Toro dio el salto y golpeó por partida triple al Cavallino Rampante. Daniel Ricciardo venció en el gallito particular a Sebastian Vettel, Max Verstappen hizo lo mismo con Kimi Räikkönen y el australiano es ahora tercero entre los pilotos en desmedro del finlandés. En los constructores, la Scuderia aguanta por un punto.
Esto es solo consecuencia de un ascenso sostenido que han conseguido en la marca de las energéticas. España fue el hito: desde el triunfo de Verstappen, Red Bull suma 166 puntos contra 148 de Ferrari. Además, llevan tres podios en línea, mientras que los italianos no se suben hace dos fechas.
Queda una fecha antes de las vacaciones estivales en Europa, Bélgica, la próxima semana. Será momento de ver si Hamilton defiende con éxito su primera fecha con el liderato del mundial y si Red Bull será capaz de destronar definitivamente a Ferrari de la escolta en los equipos. Después, será todo relajo y análisis.o
“Sienta bien haber hecho el trabajo en un fin de semana que no ha sido muy sólido para mí”.