INCIDENTE EN CHARLOTTE
ciudadana que podía movilizar cada estado en caso de necesidad. Pero quienes la apoyan a rajatabla, entre ellos la poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA), se enfocan en la segunda parte, que garantiza a cualquier ciudadano el derecho a poseer un arma para la autodefensa.
Se estima que los estadounidenses son dueños de 265 millones de armas, más de una por cada adulto. Según un es- tudio de las universidades de Harvard y Northeastern al que tuvo acceso el diario The Guardian, 133 millones de éstas se concentran en manos de los “superdueños”, es decir, sólo un 3% de los adultos, donde cada uno tendría en promedio 17 armas. Esto, al mismo tiempo que el número de estadounidenses que posee armas ha descendido desde 25% en 1994, a 22% en la actualidad.
Para los estudiosos en esta materia, la venta de armas en el país es desconcertante, ya que si bien el número de estadounidenses que son propietarios de armas va en caída (tal como lo afirma otro estudio de la Universidad de Chicago, en el que uno de cada cinco norteamericanos posee un arma) no ocurre lo mismo con la venta. Según el profesor Bindu Kalesan de la Universidad de Columbia, consultado por el diario The Times, una de las teorías es que el alza en las ventas se explica por el nacimiento de una nueva clase de cultura del arma, en la que hombres blancos mayores están construyendo grandes arsenales privados. “Pertenecen a una comunidad en donde su familia o el círculo social piensa menos de ellos si no poseen un arma”, señaló Kalesan.
Por su parte, la investigación de las universidades de Harvard y Northeastern, que se realizo en 2015 por académicos del área de la salud, encontró que la proporción de mujeres que son dueñas de armas está aumentando, al tiempo, que son menos los hombres que tienen una. En el caso de las mujeres se enfocan en la autodefensa, siendo éste un factor importante al momento de comprar un arma.
“Existe una desconexión entre tener un arma por protección y las decrecientes tasas de violencia letal en el país. No es una respuesta a la realidad actual”, dijo al diario The Guardian, Matthew Miller, uno de los líderes del estudio.
El portal The Trace, que también tuvo acceso al estudio, señaló que cada minuto se roba un arma en el país. El reporte señala que se roban entre 300 mil y 600 mil armas de fuego cada año.
La manufactura de pistolas se ha incrementado de menos de 600 en 2001 a más de 3,6 millones en 2014, el último año que se tiene información disponible. El informe señala que en algunas regiones, como el sur y el medio oeste, el alza de la popularidad de las armas ha coincidido con una campaña de lobby realizada por la Asociación Nacional del Rifle (NRA) con el fin de que se incremente el número de personas que legalmente se le permita a portar armas en público y que aumenten los lugares donde pueden llevarlas.
Policía publicará video de polémica muerte
El jefe de la policía de Charlotte, Kerr Putney, informó ayer que la institución dará a conocer el video de la muerte de un hombre negro durante un encuentro con oficiales del Estado de Carolina del Norte. Putney dijo que hará pública “la filmación de la cámara corporal y la de la cámara fija” que capturaron los disparos contra Keith Lamont Scott, cuya muerte el martes desató disturbios y presión para revelar el video. Según Putney, Scott estaba “en absoluta posesión de un arma corta”. En otro video difundido por la familia se oía a la esposa de Scott gritar “no disparen, no va armado”.
El informe señala que uno de los problemas que se ha notado es que muchos dueños de armas las dejan en el auto, las que después son robadas. The Trace investigó información del Departamento de Policía en 25 ciudades grandes de Estados Unidos y encontró que miles de armas se habían reportado como robadas de vehículos en 2014. Y, en la mayoría de las ciudades, el número va en aumento.b