Representatividad de los gremios
Entidades como la CUT y el Colegio de Profesores han sido capturados por pequeños grupos bien organizados pero con escasa representatividad, lo que no ayuda a la calidad del debate público.
atención que los principales críticos del sistema binominal retengan el poder de la principal organización sindical por una vía similar.
Todo lo anterior debe motivar una reflexión en torno a la representatividad de estas organizaciones. Tanto la CUT como el Colegio de Profesores y las federaciones estudiantiles han sido considerados los principales interlocutores en la Reforma Laboral y Educacional. No solo fueron los principales contribuyentes en materia de contenidos, sino además se transformaron en verdaderos agentes políticos durante su discusión. No obstante, la CUT tiene unos 785 mil afiliados, de los cuales solo el 40% son trabajadores del sector privado, una cifra pequeña en relación a los 8 millones de trabajadores que tiene nuestra economía. Por su parte, el Colegio de Profesores congrega a unos 58 mil docentes de un total de 100 mil profesores en el país. En ambos casos opera un sistema similar: votación indirecta y baja representatividad. Los resultados están a la vista, ya que Aguilar alcanza la presidencia con solo 18 mil votos y Bárbara Figueroa, pese a tener 30 mil votos menos que el ganador, se mantiene a la cabeza.
Debiera generar preocupación el que pequeños grupos bien organizados estén liderando los gremios del país y se arroguen la vocería de las “fuerzas sociales”, aun cuando sus dirigentes gocen de baja legitimidad o bien, sean escasamente representativos. La discusión laboral, educacional o en materia de gasto fiscal no se agota en este periodo, por lo que se hace imprescindible que las autoridades escojan como interlocutores a dirigentes que se caracterizan no solo por un discurso democrático, sino que el origen de su autoridad responda a cánones mínimos de representatividad social.