Informe de la FAO
Señor director:
Cada vez que vemos una declaración del senador Rabindranath Quinteros nos preocupa aún más el futuro de las actividades productivas marítimas chilenas, particularmente en un escenario de bajo crecimiento y falta de inversión que, aunque se quiera negar, rebota negativamente en la clase trabajadora.
Hace algún tiempo el senador acusó públicamente a la industria del salmón por la marea roja. Sin embargo, los estudios serios y técnicos determinaron otra causa. Anteriormente, había afirmado que las licitaciones eran la mejor opción “tal como se hacían en Japón”, lo que era absolutamente falso. Además, el informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), señala que no son el mecanismo más usado para adjudicar los derechos de pesca, e incluso indica que ha presentado problemas donde se ha aplicado.
Todo indica que el senador leyó el informe equivocado cuando dice que su propuesta va en línea con lo que recomienda la FAO, o simplemente lo interpreta y acomoda a sus intereses. Aunque cabe preguntarse si deben prevalecer las consideraciones políticas por sobre la sustentabilidad de los recursos.
En temas de administración pesquera el parlamentario debe reconocer que su propuesta no tiene absolutamente nada que ver con el informe del organismo internacional.