MAGALLANES CRUZADO

Ya ex defensor de Audax, de 26 años, se convierte en el 18º integrante de la legión chilena en el país azteca.

Diez de la noche y el sol golpea fuerte. No está nublado y el día es eterno. Tierra del Fuego es silencio puro, el Estrecho de Magallanes es imponente y pareciera rodearte sin pedir permiso. En esta zona (Punta Arenas, Porvenir, Torres del Paine, Puerto Natales) la gente almuerza en su casa y la hora de siesta es sagrada. Se bajan las cortinas y la vida entra en pausa. Se camina, se respira, se respeta, se comer cordero al palo sin arrepentimiento; en conclusión, se vive.

Me siento solo en un bar para cerrar la noche y se me acerca con decisión un tipo sonriente. Me dice. “Soy Jaime, fanático de Católica”. Emocionado me abraza y vocifera sin timidez: “Soy bicampeón”. Orgulloso pide dos cervezas y se sienta en mi mesa.

Fue golpeado en la vida por el mote injusto del segundón y aún tiene cicatrices de las burlas del pasado. Me muestra sus dos dedos abiertos pero para resaltar el segundo título consecutivo y para terminar con esa “V” del incapaz. Nunca ha visto a Católica en vivo y nunca se ha sentado en San Carlos, con 25 años de vida su futuro (según me confirma) lo va a llevar a esa galería.

Segunda cerveza para él y con la calma del hombre del sur me dice que su padre lo hizo católico hablándole de Moreno y Livingstone. No había fin de semana que por una radio a pilas no tratara de enganchar señal am para oír algún grito de gol de su equipo. Admira a Mario Salas, le dice Comandante y cree que será técnico de la selección chilena, defiende con su alma a Álvarez y sueña con una foto con Nicolás Castillo.

Me critica, con razón, que en Santiago los tenemos botados y reclama contra el centralismo mediático. Es muy cierto, a nosotros se nos borra el resto del país cuando hay que escribir, es de una injusticia tremenda. Conocí un club de Porvenir, estuve en las canchas sintéticas de Punta Arenas y comprendí la pasión muy profunda que tienen por sus ligas, fanáticos que esperan la edición del diario El Pingüino para enterarse de todos los marcadores. Si no fuera por ellos su notoriedad quedaría en familia.

Convido a Jaime a una pizza para seguir escuchando su relato, me reconoce que Mario Salas se equilibró y piensa que es el mejor entrenador de Chile, pidió la nueva camiseta y aún no le llega, sigue con la misma de hace cinco años y no le importa, le enorgullece: “Me trajo tantas copas que ahora duermo con ella”. Se sabe la formación de memoria y eso tiene un gran significado; cuando un hincha recita el equipo te dice que ya entró en su historia. Goza con Noir, aplaude a Buonanotte y respeta a Kalisnky, según Jaime verdaderos refuerzos.

Pago la cuenta y lo dejo con sus amigos. Abro la puerta del bar y me encuentro con el cielo negro pero puro, aire diferente a la burbuja de Santiago. Para que sepan los cruzados, en el sur del mundo también se lloró el bicampeonato. Juan Cornejo admite que llevaba dos años esperando que los rumores de un eventual traspaso se concretaran. Medio en broma y medio en serio, confiesa que cada vez que se abría el mercado, seguía atentamente las informaciones que lo vinculaban a clubes importantes y se decepcionaba al comprobar que las gestiones quedaban en nada.

Ayer, el ahora ex defensor de Audax Italiano celebró. Temprano, se enteró de su traspaso a León, uno de los clubes emergentes de la Liga Mexicana, cuyo último título fue el Apertura 2014. También festejaron en La Florida y en San Bernardo. La operación bordeó el millón de dólares. De la cifra, el setenta por ciento quedará en manos de Audax. La fracción restante la contabilizará Magallanes. “Es una gran opción para mi carrera. Había cumplido un ciclo en Audax. Para un chileno es atractivo jugar en México y lo demuestra la gran cantidad de compatriotas que hay allá”, dice. La lista de nacionales, por ahora, tiene a 18 integrantes.

Volante, central o lateral izquierdo ¿Tiene claro en qué puesto lo utilizarán en León?

Ellos me quieren como lateral izquierdo. Es una posición que más me gusta, porque me permite llegar al arco e incluso marcar goles. He jugado también de central, pero por la orilla me siento cómodo. Y es lo que necesitan en León.

Lleva tiempo escuchando que lo fichaban, pero siempre seguía en Audax. ¿Cómo lo tomaba?

Ya llevaba dos años escuchando que me iba o que no. Siempre en la época de transferencias aparecía como una opción para otros equipos, pero nunca se concretaba. Obviamente aumentaba la ansiedad. Uno quiere que llegue esa oportunidad de crecer en la carrera. Por eso estoy feliz.

Con Sampaoli ya estuvo en la Selección. Pizzi no le ha dado oportunidades. ¿Jugar afuera le dará más chances de vestir la Roja? Jugar fuera da un plus distinto. Todos los que están en la Selección actúan en clubes del exterior. Quizás ahora me miren más. Con Sampaoli estuve y fue muy bueno. Pude jugar y lo hice bien. Obviamente, uno espera una segunda posibilidad, pero se decidieron por otros jugadores. Uno no tiene que ponerse presión y también entiende que el entrenador tiene derecho a elegir. ¿Lo habían contactado para ir a la China Cup?

No. Nadie me llamó.

¿Qué sabe de su nuevo club? León es un club grande, que tiene muy buena hinchada, que fue bicampeón hace un par de años. Llegar allá es una responsabilidad importante, que estoy dispuesto a asumir como corresponde.

¿Tuvo la posibilidad de hablar con Javier Torrente, quien lo dirigirá en México? ¿Qué le pidió?

Con Torrente no he hablado todavía, pero me comentaron que me conocía desde el tiempo en que estuvo acá, cuando dirigió a Cobreloa. Eso es bueno.b