Evitar otra recesión
Un sondeo de Gallup divulgado a comienzos de mes reveló que un 30% de los demócratas estadounidenses considera que la economía está “excelente” o “muy buena”, mientras que para los republicanos es “pobre”. Los analistas coinciden en que la situación ha mejorado. Sin ir más lejos, el desempleo alcanzó 4,7% en diciembre y la confianza de los consumidores va al alza. Sin embargo, el economista David Wessel del Brookings Institution, advirtió que la economía del país enfrenta problemas crónicos que el Presidente Donald Trump deberá hacer frente.
Por un lado, muchos trabajadores se encuentran marginados. Se estima que un 15% de los hombres entre 25 y 54 años no tiene trabajo, mientras que quienes tienen uno, sus sueldos están estancados durante años. Así un hombre con un trabajo a tiempo completo gana en promedio US$ 920 a la semana, que ajustado a la inflación es lo que un trabajador en similares condiciones ganaba en 1986. Wessel señala, además, que es preocupante la ralentización en el crecimiento. El ritmo de aceleración en la productividad es “malo” y entre 1995 y 2004 el crecimiento de la productividad era lo suficientemente rápido para doblar el promedio de los estándares de vida cada 25 o 30 años, mientras que ahora tomará 70 años.
El economista Nathan Vardi escribió en la revista Forbes que el plan económico de Trump va a llevar al país a una recesión mayor que la de los 80. “Un creciente déficit presupuestario, tasas de interés y el dólar golpearán la economía estadounidense y los mercados duramente”.