SUDAMERICANO SUB 20 FASE DE GRUPOS
Alfonso Garcés, jefe de Captación de Universidad Católica, quien conoce a ambos jugadores desde su llegada a San Carlos de Apoquindo, también opta por una postura paternalista, al menos en el caso de Vargas. “El foul de Jeisson fue fuerte, pero no creo que haya habido mala leche. No creo que lo haya querido perjudicar. Fue una acción mal ejecutada en un lugar de la cancha donde no había mayor riesgo. Por lo mismo, creo, estuvo muy bien dando las excusas que corresponden. Jeisson es un niño sin mala intención”.
Aboga, también, por un compromiso múltiple. “Se le pueden achacar cosas de su poca personalidad, pero es un buen tipo. Hay un montón de influencias externas también. Soy un convencido de que en la formación no todo depende del jugador. Jeisson tiene una personalidad que lo hace muchas veces dejarse llevar y lamentablemente se le han acumulado cosas”, dice.
Y agrega: “Lo que pasó esta vez, eso sí, no creo que sea para tanto. La Selección hace que todo se amplifique. No hay que crucificarlo”.
Sin embargo, para la expulsión de Carreño, el análisis contiene un elemento distinto: la crítica al cuerpo técnico por involucrar a un futbolista en una tarea que no está dentro de sus competencias directas. “Lo mandaron de la banca a hablar con un compañero y el árbitro consideró que no correspondía”, enfatiza.