Dichos de Guillier contra empresarios
HACE ALGUNOS días, el senador y precandidato presidencial Alejandro Guillier lanzó duras críticas a los empresarios del país. Desde el Congreso, el abanderado del Partido Radical aseguró que por un lado declaran “que las empresas tienen utilidades tan altas como en el caso de las Isapres y otras, y en paralelo dicen que no hay condiciones para invertir en Chile”. Además, acusó que los empresarios “están ganando como nunca y no quieren invertir”, y que incluso es “un grupo de privilegiados” que “está bloqueando el desarrollo de Chile”.
Los dichos de Guillier no son una buena señal para el país y lo único que hacen es alimentar el clima de tensión y confrontación, en momentos en que se hace urgente que tanto el gobierno como los políticos contribuyan a cuidar el ambiente político favoreciendo el debate de ideas, las propuestas programáticas y la discusión con altura de miras.
En tiempos de bajo crecimiento económico -el Banco Central anticipó que la economía volverá a tener este año un pobre desempeño y redujo el pronóstico de crecimiento para 2017 de 1,0%-2,0%, desde 1,5%-2,5% en su IPoM pasado- las declaraciones de Guillier no contribuyen en nada a reestablecer las confianzas del empresariado, que se ha convertido en uno de los ejes de la acción del actual equipo económico. La confianza empresarial volvió a caer en marzo, golpeada, según los expertos, por una serie de factores como la huelga en Escondida, y la entrada en vigencia de la reforma laboral.
En este contexto llaman aún más la atención los dichos de Guillier, quien ha mostrado posiciones discordantes y está dejando en evidencia un preocupante tono populista más propio de otros países de la región. Con todo, los planteamientos del senador son notoriamente contradictorios con lo que una parte importante de la población considera requisitos fundamentales para retomar el progreso.