EL CRISTO CIEGO
Dirigida por por Christopher Murray. Con Michael Silva, Pedro Godoy y Ana María Henríquez. Dirigida por María Teresa Larraín. Documental. Chile, 2016. Dirigida por Kelly Asbury. EE.UU., 2017.
acción de primer nivel, esta serie ha logrado introducir la noción de familia entre todos los integrantes. Entre tanto caos y peligros, todos se quieren, se apoyan, sobreviven y están listos para una nueva aventura. El resultado es adolescente, divertido y olvidable. Eso sí, sabe perfectamente a quién está dirigido y todo lo que hace, por muy ridículo que sea, lo hace bien. (R. Martín)
Que mejor lugar para contar una parábola cristiana que el Norte Grande, con sus horizontes interminables, sus tamarugos y sus piedras en el camino. Qué mejores personajes para darle sentido a esta fábula, que los habitantes de Pisagua, Huara y La Tirana, cada cual esculpido
Niña sombra
emocionalmente en el desierto y privado de la sal, del agua y de los frutos que otros si obtienen a sus expensas. Qué mejor actor para hacer de intenso y a veces descolocado mesías que Michael Silva, un chico de silueta frágil, de palabras serenas y seguras, de mirada
“Me estoy quedando ciega. Esta es mi última película”. Nadie podría ni debería quedar impávido ante la desesperación que mana de las palabras de María Teresa Larraín, protagonista, guionista y directora de este documental. La nueva cinta del ciclo Miradoc pone en escena a una chilena que partió a Canadá tras el Once, que trabajó por décadas en el audiovisual de Toronto, pero que en cierto punto afrontó una realidad que había ignorado, pero que, según cuenta, conocía desde niña: que padecía una miopía progresiva y que perdería la visión. Con el proceso ya en curso viaja a Chile, se reúne con la familia, se vincula a un grupo comerciantes ciegos de Santiago Centro, afronta el difícil porvenir. Niña sombra le regala al cine chileno algunas imágenes estremecedoras, como un detalle de la operación del ojo de la propia documentalista. En ese sentido, por de pronto, clava sus banderas. (P. Marín)
Los Pitufos en la aldea perdida Esta vez es Pitufina, la única mujer de todo el clan de los Pitufos, la que lleva las riendas de la aventura. A diferencia de todos los otros personajes, ella es la única cuyo nombre no la define. Existe Pitufo Gruñón, Bromista, Genio, etc, pero ¿qué es una Pitufina? Esto desencadena en ella una crisis existencial y decide buscar su camino en la vida. Por supuesto están Gargamel y su gato Azrael, además de unos seres que viven en el bosque prohibido. Acorde a los
Cristo ciego
Una mujer fantástica
El tiempos que corren, era momento de entregarle a Pitufina un protagónico, que dejara de ser sólo la rubia bonita del montón y, de paso, entregar un mensaje claro a las niñas del mundo. Como obra cinematográfica tiene poco aporte, pero como cinta destinada a entretener, cumple su propósito de manera aceptable. (R. Martín)
imperturbable, como si los pestañeos le fueran negados y como si la risa, la lágrima o las bromas estuvieran ajenas a su personalidad casi sobrenatural. Todos estos elementos bastan para darle a
un lugar diferente entre las películas chilenas. (R. González)