La fiscal general de Venezuela profundiza las divisiones en el chavismo
► Luisa Ortega Díaz, una aliada fiel de Hugo Chávez, ha surgido como una voz disidente dentro del oficialismo. ► Apuntó a las fuerzas de seguridad como responsables de más de la mitad de los heridos en las protestas.
“Fue impactado con un objeto como este”, aseguró el miércoles la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, al mostrar un cartucho de una bomba lacrimógena durante una conferencia de prensa, para explicar las causas de muerte de Juan Pernalete, de 20 años, quien falleció el 26 de abril tras participar en una protesta en Altamira y luego de ser impactado por un artefacto de ese tipo lanzado por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Pernalete es una de las 57 personas que han fallecido durante las manifestaciones anti gubernamentales, que desde el 1 de abril, han estallado en Venezuela.
Con voz firme, la fiscal aseguró tener cinco testigos del hecho y acusó directamente a las fuerzas de seguridad del país de ser responsables de “más de la mitad de los lesionados”. Las declaraciones de la fiscal venezolana llegan a remecer al gobierno de Nicolás Maduro. No sólo porque su versión contradice lo afirmado por el oficialismo -que aseguró que el joven había sido asesinado por una pistola
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, criticó el miércoles el uso excesivo de la fuerza
para reprimir las protestas opositoras.
A pesar de ser una aliada del chavismo, en
los últimos meses Ortega ha dado varios golpes al gobierno de
Nicolás Maduro.
Sus recientes declaraciones suponen el giro definitivo como figura disidente dentro del oficialismo en
Venezuela.
de pernos accionada por manifestantes que participaban de la protesta- sino porque su postura llega a confirmar un giro que profundiza las divisiones dentro del chavismo.
Ortega Díaz también aseguró que era “imprescindible y urgente” implementar “el seguimiento y control de las actuaciones de los funcionarios en ejercicio de la función policial en materia de orden público” y criticó las detenciones irregulares durante las manifestaciones. Según Ortega, 2.674 personas han sido imputadas por delitos comunes en las últimas ocho semanas y solo 284 han sido puestas en libertad.
La fiscal de 59 años había sido hasta hace pocos meses atrás una aliada clave del chavismo. Su relación con el fallecido Hugo Chávez comenzó en 1998, cuando Ortega trabajaba en un estudio de abogados en el estado norteño de Aragua y se integró a la campaña presidencial del ex coronel. En 2002 ingresó al Ministerio Público, y en 2007 llegó a su puesto actual con el aval de Chávez, en cuyos funerales estuvo en primera fila en 2013.
La Asamblea Nacional (el Parlamento, en ese entonces controlado por el chavismo), volvió a reelegirla como fiscal general en 2014 para un nuevo mandato que concluye en 2021. Fue también la encargada de impulsar la condena de casi 14 años del dirigente opositor Leopoldo López, por propiciar las protestas antigubernamentales de febrero de 2014, que dejaron 43 muertos.
Ahora Ortega se posiciona como una suerte de “heroína” para la oposición y una voz disidente dentro de las filas del oficialismo. El vicepresidente de la Asamblea Nacional, el dirigente opositor, Freddy Guevara calificó de “histórica” su declaración y Lilian Tintori, la esposa de Leopoldo López, celebró ayer las palabras de Ortega y aseguró que la fiscal “se pasó al lado correcto”.
Sus palabras tuvieron también reacciones en el chavismo. El número dos del oficialismo, Diosdado Cabello, la tildó de “traidora”. “Pido disculpas a la revolución por haber designado a Luisa Ortega Díaz como fiscal general. (…) Yo fui uno de los que la defendí y tuve que convencer a mis compañeros”, aseguró ayer Cabello, quien era presidente de la AN cuando Ortega fue retificada como fiscal.
“Rechazamos categóricamente la ligereza con que se efectúan declaraciones que intentan soslayar el liderazgo” aseguró a su vez el general y ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, quien salió en defensa de los uniformados y el papel que En diciembre estuve en Chile y le comuniqué a los medios de comunicación y también al canciller (Heraldo Muñoz) que la situación de salud de mi hermano Braulio era precaria. Por eso necesitaba un arresto domiciliario para que pudiese tener posibilidad de recuperarse de las torturas físicas y psicológicas de las cuales había sido víctima. Cinco meses después logramos finalmente que la jueza dictara como medida humanitaria este arresto domiciliario que le permite a Braulio ir a su casa y recuperarse. Esto en medio de toda la injusticia porque mi hermano es inocente. han jugado en las manifestaciones.
En los últimos meses, Ortega ha dado varios golpes al gobierno de Nicolás Maduro. Luego de que a fines de marzo el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) asumió las funciones de la Asamblea Nacional, la fiscal denunció la movida como “una ruptura del orden constitucional”. A pesar de que el TSJ revirtió la medida, ésta desató las protestas ¿Cuál es la situación actual de su hermano?
Braulio tiene un arresto domiciliario con estrictas reglas. No puede hacer declaraciones a la prensa. Está en su casa, hay unos guardias en la puerta, y esto es un alivio porque podrá recuperarse. Pero estamos conscientes de que la lucha no ha terminado. Braulio es inocente y vamos por la libertad plena. Quiero agradecer a todo el pueblo chileno por esto.b que se han desarrollado hasta ahora en distintas ciudades de Venezuela.
La fiscal también rechazó el llamado de Maduro de realizar una Asamblea Nacional Constituyente ya que, en su opinión, agrava la crisis por la que atraviesa el país. Ortega también criticó, en una entrevista con el diario The Wall Street Journal, la “represión” contra las protestas opositoras.b