Partidos que apoyan a Guillier definen criterios de plantilla parlamentaria
► Se preparan para la inminente competencia con la DC. Principal nudo es superávit de candidatos. ► La idea es acelerar las negociaciones para zanjar los cupos y descomprimir pugnas.
Los martes y viernes de cada semana. Ese es el itinerario que fijaron los equipos a cargo de la negociación parlamentaria de los partidos que apoyan la candidatura de Alejandro Guillier, el PR, PS, PC, PPD, IC y MAS, para avanzar “lo más pronto posible” en la confección de la nómina de candidatos al Congreso para competir en la elección de noviembre próximo.
El grupo está conformado por los secretarios generales de cada partido, además de expertos electorales, entre ellos René Jofré (PPD) y Patricio Tombolini (PR). Ya se definió una estructura de trabajo: en concreto, se establecieron tres criterios centrales para ir dirimiendo la cantidad de cupos y las zonas donde predominará cada partido.
El primero de ellos, la electividad que tuvo cada colectividad en la pasada elección municipal ( 2016). El segundo, el número de diputados que lograron en los comicios parlamentarios de 2013, donde el PS y el PPD obtuvieron 15 escaños cada uno, es decir, más del doble que sus socios del PC (6) y del PR (6), primera tienda en levantar la opción presidencial de Guillier.
Por último, los partidos buscan respetar también los criterios “cualitativos”, como aquellos cupos que son irrenunciables y simbólicos.
Al PC, por ejemplo, le interesa mantener supremacía en el distrito 13 (Pedro Aguirre Cerda, San Miguel, El Bosque, entre otras), donde su presidente, Guillermo Teillier, busca su reelección.
Aunque los equipos de la denominada lista “guillierista” -se está buscando un nombre para inscribir el pacto, pues aún no convence del todo la opción “alianza progresista”están trabajando con el “acelerador a fondo”, la negociación no ha estado exenta de complejidades.
Aunque aún no se ha sincerado del todo el cuadro de quiebre en la Nueva Mayoría tras la decisión de la DC de llegar a primera vuelta con Carolina Goic, los partidos alineados detrás de Guillier anticipan que la competencia será total entre el “progresismo” y el camino propio de la DC, si es que el escenario de candidaturas paralelas se mantiene hasta noviembre.
Tras las primeras conversaciones, han aparecido los primeros problemas: que las solicitudes de cupos por parte de los partidos excede el número total de candidatos que puede presentar una lista de acuerdo a la ley.
Al alero del sistema electoral
Otra complicación: frente regionalista
El senador Alejandro Guillier inició conversaciones con la federación de partidos regionalistas con miras a sellar un acuerdo presidencial programático, pero también parlamentario. Esta eventual demanda de nuevos cupos podría complicar a la Nueva Mayoría sin la DC.
aprobado en 2015 para reemplazar el binominal, y que se estrenará en estas elecciones, cada lista puede presentar un máximo de 183 postulantes a la Cámara Baja. Sin embargo, la suma total de postulantes a diputados que aspiran a llevar los seis partidos llega a 220.
Es decir, deberán ponerse de acuerdo para dejar 39 postulaciones fuera de competencia de aquí al 21 de agosto, cuando vence el plazo para inscribir tanto las candidaturas parlamentarias como las presidenciales.
En el Senado la situación no es menos compleja.
Del total de 30 cupos que tiene cada lista para sus candidatos a la Cámara Alta (este año se eligen 23 senadores), tanto los socialistas como el PPD aspiran a presentar 10 candidatos a la Cámara Alta cada uno.
O sea, dos de los seis partidos ocuparían virtualmente dos tercios de la nómina permitida, lo que complejiza la confección de la lista de senadores. El “exceso” de postulantes, explican en los partidos, se debe, en parte, a la necesidad de cumplir con la denominada cuota de género que introdujo la nueva ley y que implica que el 40% o más de los postulantes deben ser mujeres.
Considerando que partidos como el PPD tienen elencos de hombres bastante definidos, se han centrado en la búsqueda de candidatas que permitan cumplir con la ley, lo que ha “abultado” el número de aspirantes total de la lista, según explican en diferentes colectividades.
Zonas rojas
Las regiones de Valparaíso, El Maule y La Araucanía asoman como las zonas más complejas en la competencia al Senado.
En estas tres zonas se eligen cinco senadores y la competencia entre el “progresismo” y la DC será directa.
En la “V”, las opciones de los actuales senadores Ignacio Walker (DC) y Ricardo Lagos Weber (PPD) -de las antiguas circunscripciones V Cordillera y V Costa, respectivamentese ven amenazadas por el diputado PPD Marco Antonio Núñez, el diputado DC Aldo Cornejo, la senadora PS Isabel Allende y el PR Nelson Avila. Sin contar que la oposición tiene por lo menos cinco candidatos.
En la “VII”, la DC aparece con más opciones con la ex ministra del Trabajo Ximena Rincón, además del actual presidente de la Cámara Alta, Andrés Zaldívar.
Esto pone cuesta arriba la competencia al bloque progresista, pues el PPD apuesta por cartas como la ex diputada Romy Rebolledo y el diputado Jorge Tarud, mientras el presidente del PS, Alvaro Elizalde, ve cada vez más lejos su opción, al no poder dedicarse 100% a hacer campaña en la zona y el interés adicional del PR de levantar una carta competitiva. Todo, en un contexto en que Chile Vamos presentará al menos cuatro candidatos. Donde también existe preocupación a nivel senatorial es en La Araucanía.
La DC también amenaza con el diputado Fuad Chahín y el ex intendente Francisco Huenchumilla, quienes se enfrentarán a los hoy senadores PPD Jaime Quintana y Eugenio Tuma. En la “IX”, el oficialismo enfrenta un complejo cuadro de competencia con las cartas opositoras.b